Veracruz sin padrón de beneficiario de programas sociales y subejercicio de 50% en obra pública, denuncian diputados

  • Durante su comparecencia, el secretario Guillermo Fernández Sánchez, reconoció existencia de un subejercicio de más de un 50 por ciento de los recursos asignados para generar obra pública e infraestructura social en el presente ejercicio fiscal; lo que le valió el calificativo de “negligente”; el funcionario estatal detalló que sólo se han aplicado el 46% de los recursos destinados para infraestructura.
  • Se puso en duda la efectividad de los mil 20 promotores contratado por el programa  Sembremos Bienestar Común, que tiene un costo de 139 millones de pesos en nómina, pero nadie los conoce.
  • Desde el inicio de la comparecencia se pidió conocer los sueldos y las oficinas en las que laboran los promotores de programas sociales, a lo que el funcionario detalló que están divididos en 20 territorios del Estado; aseguró el salario de los trabajadores va de 13 mil a 24 mil pesos y acuden a las regiones para conocer los potenciales beneficiarios.
  • Fueron constantes las solicitudes de enviar a la oficina de los diputados los nombres, región y salario de cada uno de los promotores.

Xalapa
A un año de que inició la actual administración, la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) no tiene listo un padrón de beneficiarios de programas sociales, pues reconoció que se sigue integrando, por lo que tampoco es público en su portal, denunciaron diputados locales.
Durante la comparecencia, Guillermo Fernández Sánchez, titular de Sedesol, ofreció proporcionar los datos parciales de los beneficiarios, y aclaró que la información se sube de manera trimestral, tal como lo marca la ley.
“Dice que no los encontró, pero se los podemos hacer llegar y decirle cuál es la dirección para hacerlo, no ocultamos nada, tenemos un portal de transparencia y ahí tenemos que ir publicando lo que se hace en la Sedesol”, respondió a la diputada María de Jesús Martínez Díaz, quien le aseguró que no están ni los contratos de obra.
Por lo anterior, se puso en duda la efectividad de los mil 20 promotores contratado por el programa  Sembremos Bienestar Común, que tiene un costo de 139 millones de pesos en nómina.
Desde el inicio de la comparecencia se pidió conocer los sueldos y las oficinas en las que laboran los promotores de programas sociales, a lo que el funcionario detalló que están divididos en 20 territorios del Estado.
Los promotores se han contratado desde el mes de enero, cada oficina cuenta con 45 sembradores o trabajares de campo que acuden a censar a los beneficiarios de los programas sociales; además cuatro especialistas, un administrador y un coordinador responsable.
En ese sentido, aseguró el salario de los trabajadores va de 13 mil a 24 mil pesos y acuden a las regiones para conocer los potenciales beneficiarios. Fueron constantes las solicitudes de enviar a la oficina de los diputados los nombres, región y salario de cada uno de los promotores.

Así mismo, durante su comparecencia, el secretario Guillermo Fernández Sánchez, reconoció existencia de un subejercicio de más de un 50 por ciento de los recursos asignados para generar obra pública e infraestructura social en el presente ejercicio fiscal; lo que le valió el calificativo de “negligente”.
El funcionario estatal detalló que sólo se han aplicado el 46 por ciento de los recursos destinados para infraestructura, al firmar contratos y comprometer el pago de los anticipos, sin embargo, al dar las cifras de las cantidades invertidas y el monto aprobado para el presente ejercicio, los datos no concuerdan.
Se han comprometido 399 millones 758 mil 77 pesos en obras y acciones simples, que se podrían concluir antes de que termine el año. Según los datos que proporcionó Guillermo Fernández estaría pendiente de ejercer 189 millones 241 mil pesos, lo que representa poco más del 30 por ciento del total de los recursos asignados.
Justifica el subejercicio al referir que ellos iniciaron en tiempo y forma el proceso de licitación e invitación a empresarios para poder realizar obras y acciones, pero no se atendió la invitación ante la desconfianza de que la obra ya estaba asignada para algunas constructoras oficiales.
“Nosotros iniciamos con el proceso licitatorio a buen tiempo, sin embargo, con la voluntad que se tiene para darle juego de los constructores del estado; el encargo que tenemos es que le demos juego a la mayoría que podamos”.
Dijo, se bajó el padrón de empresarios de la Sefiplan, y se empezó a invitar a los constructores, pero muchos no asistieron.
“Desconfiaron, pensaron que iban a hacer comparsa para participar y que se tenía un ganador, se declararon desiertas, se volvieron a repetir algunas, la curva de aprendizaje ha sido de esa manera”, dijo a los legisladores.
“En muchos de los casos nos ganó el tiempo, tuvimos que hacer uso de las adjudicaciones directas. Nuestro plan era no caer en el subejercicio pero nos quedarnos corto, para que los veracruzanos no se queden sin el beneficio de tener una vivienda más digna”, explicó ante diputados locales que criticaron la manera en cómo evadía las preguntas que se le formulaban.
Ante lo reiterado de las preguntas, trató de justificar que no hay subejercicio pues según él, el dinero se puede aplicar hasta el 31 de diciembre, y en el caso de fondos federales la Ley de Disciplina Financiera permite gastar el dinero hasta marzo del año próximo.
“Tenemos los contratos firmados, tenemos los programas de obra, tenemos todo para solicitar la conclusión de las obras hasta el siguiente año», justifico.