¡Están saturados!, ningún hospital de Xalapa y Coatepec quiso atender a repartidor menor de edad quien falleció tras 6 horas de agonía

• Familiares, amigos y demás compañeros de Lenin, se manifestaron en la Plaza Lerdo para denunciar la omisión de personal de salud que se negó a brindarle ayuda con el argumento de que no tenían capacidad ni personal adecuado para atenderlo, a pesar de tener tres costillas rotas y ser menor de edad.
•  Exigieron al Gobierno de Veracruz que designe un hospital para atender a quienes tienen un accidente vehicular o que no tienen Covid-19, para evitar que más personas mueran por falta de espacios en los nosocomios.

Xalapa

Pese a que oficialmente los hospitales del sector salud del Gobierno de Veracruz se encuentran ocupados en un 65%; familiares, amigos y compañeros “repartidores” de Lenin M, se manifestaron para denunciar lo que consideran fue negligencia médica que derivó en la muerte del joven menor de edad de 17 años, pues tras seis horas en agonía, ningún hospital de Xalapa y Coatepec lo quiso atender.

Lenin sufrió un accidente en su motocicleta mientras hacía un servicio de entrega de comida como parte de su “trabajo”; el percance ocurrió la noche del sábado pasado en la avenida Rébsamen y tras intentar ser ingresado en al menos seis hospitales, no fue sino hasta seis horas que falleció en espera de ser atendido, sin oxígeno y con tres costillas rotas.

Ya habían recorrido hospitales públicos y privados como el Hospital Civil “Doctor Luis F. Nachón”, el Centro de Alta Especialidad “Doctor Rafael Lucio”; la Clínica Vital, Los Ángeles, el hospital San Francisco e incluso un hospital de Coatepec.

“Tuvieron que transcurrir casi seis horas, lo dejaron morir, no tenía Covid-19, era un muchachito que estaba trabajando y luchando para llevar alimento a su casa, lo dejaron morir por un accidente”, dijo Juan A S, uno de los compañeros de Lenin.

Agregó que los repartidores trabajan por necesidad durante la pandemia, porque muchos son víctimas de desempleo y ésta es una forma de apoyar económicamente a sus familias; Lenin cobraba 35 pesos por entrega, aún con el riesgo de contraer el Coronavirus.

Así mismo reprochó: “Estamos sentidos porque nosotros damos la cara por aquellos que no pueden salir de sus casas, hay mucha gente asalariada que están en su casa, disfrutando, qué bueno que nos den trabajo, pero de se cuenta que nosotros nos estamos exponiendo a infectarnos y no hay quienes nos atiendan, el muchacho no tenía Covid-19; que nos digan qué hospital nos va a recibir en caso de que un motociclista, un taxista se llegue a accidentar”. 

 Familiares, amigos y demás compañeros de Lenin, se manifestaron en la Plaza Lerdo para denunciar la omisión de personal de salud que se negó a brindarle ayuda con el argumento de que no tenían capacidad ni personal adecuado para atenderlo, a pesar de tener tres costillas rotas y ser menor de edad.

 Exigieron al Gobierno de Veracruz que designe un hospital para atender a quienes tienen un accidente vehicular o que no tienen Covid-19, para evitar que más personas mueran por falta de espacios en los nosocomios.

“Fue evaluado en la clínica Vital, fuimos a seis hospitales y nadie lo quiso recibir, lo recibieron hasta el momento en que fuimos muchos para exigir que lo recibieran y lo recibieron, pero no lo atendieron; fuimos al hospital Los Ángeles y a pesar de ser privado no lo atendieron”.

Incluso, señalaron que en hospital Los Ángeles se negaron a atenderlo porque argumentaron tenía Covid-19, lo cual es mentira porque llevaba la hoja de la clínica Vital en donde decía su estado; les pidieron 80 mil pesos diarios para mantenerlo con un tanque de oxígeno; situación que para ellos era imposible: “Nadie puede pagar esa cantidad, la familia está muy triste, no se vale, vendemos a exigir que nos den respuestas para que haya justicia, al menos una indemnización para la familia y que a nosotros nos proteja porque todos estamos expuestos”, señaló el repartidor Rubén de Jesús G.

Tras la manifestación, una comisión de repartidores entró a Palacio de Gobierno para ser atendido por autoridades estatales.