Héctor Yunes Landa

MÉXICO, D.F.- Un hombre que lee se enriquece de cultura. Un hombre que escribe le da luz al mundo.
Esta semana estamos de luto, afligidos por la pérdida de uno de los más grandes escritores del castellano.
El pasado jueves 17 de abril, ha partido uno de los hombres que despertó la imaginación de miles de lectores, que nos legó un mundo diferente en el cual podemos refugiarnos cuando nuestra vida se torna simple. El mágico mundo de las letras ya no es desconocido para muchos gracias a él.
Descanse en paz Gabriel García Márquez, que sus escritos nos sigan dando luz.
No tengo duda que muchos mexicanos sentimos cierta amargura en nuestra boca por el deceso del maestro García Márquez. En varias partes del mundo se lamenta la falta de uno de los pilares de la narrativa del siglo XX.
Ya no habrá más cuentos peregrinos, sólo cien años de soledad, si no dejamos de lado los tiempos de cólera.
El aire está impregnado de nostalgia ante la partida del gran GABO. Nacido en Colombia, encontró serenidad en México, para pertenecerle al mundo al encontrar en sus obras esa sustancia creativa que nos hermana la imaginación.
Hablar del Maestro García Márquez, es hablar de cosas serias, como bien refiere Héctor Aguilar Camín, es hablar de periodismo serio, de unas ganas por contar la vida por el gusto de estar vivo para contarla.
La vida y obra del Premio Nobel de Literatura nos recuerda que no sólo hay que vivir, sino que hay que dejar algo en este mundo para que otros vivan mejor. Este magnífico hombre nos legó su genio a través de sus obras, que seguirán nutriendo el espíritu de muchas generaciones.
Como veracruzano me siento orgulloso que uno de los más grandes escritores, como Gabriel García Márquez, haya hecho de México su hogar y que la Universidad Veracruzana publicara su primer libro en nuestro país: «Los funerales de la Mamá Grande», estando al frente de la Editorial de nuestra Alma Máter, Sergio Galindo, su fundador y primer director, además de gran novelista xalapeño.
Sirva este espacio para externar mis más sentidas condolencias a la familia del escritor y a todos los que sufren su partida.
Espero que en México el gusto por la lectura se siga desarrollando para que nuestra sociedad esté mejor preparada ante los retos presentes y futuros.
hector.yunes@senado.gob.mx