EL SERVICIO DE TAXIS LIBRES, UN COCHINERO
60 SEGUNDOS
RAUL GONZALEZ RIVERA
EL SERVICIO DE TAXIS LIBRES, UN COCHINERO
Ahora que la competencia ha elevado el número de centrales de taxis controlados, los “libres” operan bajo condiciones verdaderamente infames.
Sus unidades apestan, difícilmente las lavan y sus choferes, salvo honrosas excepciones lucen sucios, sin bañarse, lo que ha provocado que los usuarios prefieran al servicio que presta el radio taxi.
Cuestionados algunos de los conductores de estos taxis que se dicen libres, porque no están sujetos a ninguna llamada telefónica, ni central que lo apadrine, refieren que no les queda de otra. Los concesionarios de estas unidades, con motivo de la pandemia, redujeron de dos a uno, los conductores de sus automóviles, los cuales tienen bajo su encargo dichas unidades por 16 horas diarias.
Generalmente, son vehículos que pueden enfrentar fallas mecánicas que van desde las más sencillas como un ponche de neumáticos, hasta las que tienen que ver con el sistema de frenos defectuoso, la dirección fuera de su normalidad y a sus choferes, les falta tiempo para poder lavar sus vehículos.
El descontrol que existe en la coordinación o atención de este que es uno de los servicios públicos, que más afecta a los usuarios es la falta de una tarifa autorizada por la dirección de tránsito y transporte público. El grueso de taxistas, impone el cobro de dejadas como mejor le acomoda. Las que cobran los taxistas libres suelen ser anárquicas, ya que el conductor del taxi las aplica a su antojo.
El servicio del taxi a los usuarios, es de los peor calificados que se ofrecen en la entidad veracruzana. Carecen estas unidades de un orden en sus colores, ya que algunos son rojo y blanco del sexenio de Fidel Herrera y otras de color verde, ordenado por el gobierno de Javier Duarte y unas lucen el color azul y blanco. Esta falta de uniformidad, ha dado lugar a la constante de asaltos en que se ven involucrados los taxistas, como asaltantes o en otros ejemplos, son los atracados junto con sus pasajeros.
Y si a todo ello, le suma usted que en la ciudad circulan alrededor de 20 mil taxis, entre los libres y los que operan bajo el concepto de Radio Taxis, nomás calcule usted lo que se ha dicho hasta por la propia autoridad municipal, cuando afirmó que Xalapa es rehén de los taxistas. No le faltó razón, pero frente a este conflictivo fenómeno, ninguna autoridad relacionada con el transporte público, quiere poner el dedo en esta llaga purulenta.
El público usuario, frecuentemente echa pestes contra un servicio que debiera ofrecer una atención esmerada y confiable, pero que no es así. En el taxista, la gente tiene desconfianza, tiene que preguntar constantemente cuál tarifa va a pagar y debe cuestionarle acerca del conocimiento que tiene de la geografía capitalina, porque una mayoría inclusive desconoce cuales son las calles que conforman el casco histórico.
El taxista bilingüe, que solo estuvo en la imaginación de los alcaldes priistas Elizabeth Morales y Américo Zúñiga jamás cristalizó como un proyecto que previamente habrían anunciado en el curso de sus administraciones, menos la propuesta de “yo leo en taxi” y que consistiría en que mientras durara su dejada, el pasajero, podría recurrir a la bandeja de lecturas que el prestador de este servicio brindaría a sus pasajeros cultos y los no cultos, ¿qué le parece? Esperemos.
EL KINDERGARTEN NACIO EN ALEMANIA Y VINO A MONTERREY
Cosas y casos anecdóticas o para la historia.
El jardín de niños o kindergarten, abrió puertas por vez primera en Alemania hacia el año de 1837.
Sus fundadores lo concibieron como un experimento social donde su creador, el pedagogo alemán Friedrich Frobel decía que los niños deberían ser “regados como a las plantas de un jardín”.
A este kindergarten también se le llamaría “escuela de párvulos” y aquí en México se le conoce igualmente como kínder, jardín de niños o educación preescolar.
Dentro de esta nota curiosa, cabe destacar que en el año de 1906 abrió el primer kindergarten en Monterrey.
Por supuesto que este constituyó un gran acontecimiento dentro de la educación mexicana.
El Diario, la patria de México, en su primera plana del miércoles 29 de agosto de 1906, en su primera plana, al centro, publica una nota, cuya cabeza decía Un “kindergarten en Monterrey” y en parte de su cuerpo informativo, advierte textualmente que el kindergarten sirve para ejercitar las facultades del niño, así físicas como estéticas, así morales como intelectuales”.
Más adelante refiere la nota, la reglamentación a que está sujeto el establecimiento cuya creación venimos comentando, corresponde a lo establecido en general para tal objeto, no es pues nuestro intento hacer mención de ello, sino solo consignar esa nueva muestra del gobierno neoleonés de lo que constantemente se preocupa por dotar a sus gobernados de todo aquello que signifique un avance en la cultura de aquel pueblo.
Enseguida, en su siguiente párrafo, el periódico sugiere que alaba el nuevo kindergarten uy augura que deberá ser el precursor de muchos otros que llenen por doquier la misión educativa que les está encomendada y que ese y los demás produzcan los resultados plausibles a que están llamados y que otros gobiernos imiten el proceder.
El medio informativo, reseña igualmente que el kindergarten, no debe ser considerado precisamente como una escuela, ya que su objeto es proporcionar a los niños en la corta edad a que son admitidos en el desarrollo de la sociabilidad; es algo así como la preparación para poner en juego a su tiempo la inteligencia del párvulo para especulaciones de mayores vuelos, según la intensidad del desenvolvimiento intelectual de cada uno.
Todo lo anterior, porque uno de los tres lectores de esta columna, en plática amistosa se preguntaba y cuestionaba porqué el kínder o jardín de niños, no es precisamente obligatorio, para quienes lo cubren como sus alumnos y en cambio, para su fortalecimiento, en el sistema educativo mexicano, hasta se creó la carrera de educadora que depende de las escuelas normales del país. Y particularmente su matrícula, se abre originalmente para cursar estudios de esta profesión, siendo preferentemente mujeres.
ANTE LA VIOLENCIA, LOS POLICÍAS Y LA MACANA
Xalapa está viviendo o resucitando aquellos días en que los gobiernos priistas a fuerza de meter policías y macana acababan por golpear, dejar lesiones permanentes y perpetuas en sus víctimas, porque solamente así podía dar respuesta el área del poder público a las demandas y reclamaciones sociales.
La única protesta que la gente aplaudió, felicitó a sus participantes y coadyuvó a su plena realización con la celebración de marchas, mítines, plantones y huelga de hambre, fue la gesta llevada a cabo por los universitarios en aquel trágico año del 68.
Aunque al final del día, la policía y fuerzas armadas arremeterían aquí y en la ciudad de México en contra de los estudiantes y académicos en la lucha y justa demanda por contar con las elementales libertades de expresión, reunión en las plazas públicas y la democratización del país, la sociedad civil mostró su apoyo y repudio a la vez en contra del presidente Gustavo Díaz Ordaz y su entonces secretario de gobernación, Luis Echeverría Álvarez.
Posterior a la gesta referida, los mexicanos sabrían de las medidas de represión que de siempre aplicaron los gobiernos sexenales, en contra de los grupos sociales, fueran de la sigla y nomenclatura que usted quiera y prefiera. No hay en la historia contemporánea, a partir del estallido del movimiento estudiantil, que derivó en la golpiza y asesinato de varios centenares de jóvenes y académicos, de lo cual, se habla, pero nada se dice de juzgar como criminales de lesa humanidad a los políticos muertos y vivos que todavía quedan, como autores de la masacre en cuestión.
Sin embargo, cuando el diálogo se agota, sobreviene el ataque contra grupos sociales o ciudadanos en lucha. La que usted ejemplifique, de siempre ha sido lo mismo. Y únicamente consiguen ponerse a salvo, los grupos de choque, que operan a favor de las instancias oficiales y que ahora suelen hacerlo, pero desde las redes sociales.
La última refriega, en la que inclusive resultaron como lesionados, maestros jubilados y pensionados, a los cuales funcionarios públicos no regatearon, sino estaban robando sus justas pensiones, pero que habiendo salido a la calle, para elevar su protesta y condena, marchando por la calle de Enríquez, algunos de ellos, inclusive en silla de ruedas, al celebrar su mitin en la plaza Lerdo, más conocida como plaza de los desnudos, sobrevino como cerrojazo la arremetida brutal, con macanas eléctricas que portaban los elementos uniformados de la SSP, hasta golpear y dejar huellas permanentes y notables en los cuerpos de destacados personajes de la academia en Veracruz. A ninguno de esos verdugos detuvo el régimen, ni castigó. Esto en el sexenio que compartieron como gobernadores Javier Duarte y Flavino Ríos Alvarado.
Durante los dos años del régimen albiazul, Xalapa recobró su ancestral paz social y tranquilidad en sus calles, cancelándose toda expectativa de mitin, plantón o protesta pública en la plaza Lerdo.
Anteayer y ayer, guardianes del orden público, blandiendo sus macanas y cubriéndose con los escudos parecían presagiar nuevos vientos de violencia institucionalizada. El Pasaje Tanos, pareció por un momento haber sido tomado por la policía de la SSP, cuyos elementos, guardado una distancia de cinco metros, habrían asumido su control prácticamente de todo ese pasaje. Nadie explicó de qué se trató.
Pero si se temía que volvieran el grupo de feministas y atacara como hace un año inmuebles del comercio organizado, el edificio de la Catedral y los pórticos de los edificios públicos que tienen su asiento en el corazón de la otrora ciudad de las flores y la cultura. Es todo.
