EL AMOR (A LA DEMOCRACIA) EN LOS TIEMPOS DEL COVID

SAN LUNES

Por El Tlacuilo

EL AMOR (A LA DEMOCRACIA) EN LOS TIEMPOS DEL COVID

BOTÓN DE MUESTRA

Dejen les platicamos una historia de la vida real; pero si nos permiten diremos “el pecado pero no el pecador”: Sucede que en el último proceso electoral del periodo Duarte, uno de los hombres de mayor confianza del ex Gobernador fue candidato uninominal  a diputado local; el aludido sabía que si perdía la campaña quedaría expuesto a las manos de los enemigos de su jefe, ganara quién ganara la gubernatura porque el candidato por el PRI era antagonista del Gordobes, mientras que el del PAN lo odiaba con odio choleño; por lo que es una obviedad que dentro del esquema del candidato no se contemplaba la derrota .

Para colmo de males los añejos problemas de salud del flaco hicieron crisis a media campaña proselitista y una úlcera gástrica le reventó en pleno mitin, la sangre busco salida por “salva sea la parte” inundando su ropa de sangre. El candidato en cuestión fue inmediatamente trasladado al hospital en donde el médico le prescribió reposo absoluto, lo que el paciente impaciente no aceptó porque aún le faltaba casi un mes de campaña; “si no descansa se puede usted morir”, aseguró el médico. “Pues me la juego, si pierdo me chingan”, retobó el impaciente y se fue a continuar con sus recorridos.

Para su fortuna ganó las elecciones y no se murió, durante su periodo como diputado nunca fue molestado, además actualmente anda con bajo perfil con el único deseo que no se acuerden ya de él.

Que sirva este ejemplo para hacer entender al Ople y al INE que si ellos no marcan restricciones para los candidatos durante las próximas campañas en medio del Covid, los aspirantes no van a frenarse de mutuo propio; queda claro que para muchos de ellos será más importante el cargo que su propia vida, sin exagerar.

EL PAÍS DE NO PASA NADA

Hasta el momento entendemos que las campañas se llevaran a cabo como si no estuviera sucediendo nada, es decir, los organismos electorales no han dicho si se prohibirán los eventos masivos durante los tiempos proselitistas porque los actos multitudinarios serán peligrosos; aparte de que son una estrategia obsoleta que solamente desgasta a los candidatos, les consume mucho dinero y los engaña con una percepción errónea de su realidad; pero si no se regulan, ninguno de ellos querrá mostrarse débil, bastará con que cualquiera haga un evento atiborrado de gente para que lo sigan todos los demás.

No se ha pensado tampoco en que repartir propaganda arriesgaría la salud de quienes repartan los folletos y de quienes los reciban. Tampoco se ha hablado de que será un factor de riesgo que todos los votantes utilicen un solo lápiz para marcar las boletas y se encierren en un mismo cubículo para hacerlo, después de permanezcan formados por varios minutos.

SIN REMEDIOS

Ninguna autoridad ha propuesto el voto anticipado, ninguno de los organismos electorales amaga con ampliar el horario de las votaciones; mucho menos contemplan limitar la movilidad de los candidatos y de sus seguidores; es más, la Secretaría de Salud y los Congresos hacen mutis a pesar de que en este momento estamos viendo los nefastos resultados de las fiestas decembrinas.

Quizás los candidatos no lo vayan a entender, pero de nada les va a servir ganar una alcaldía o una diputación estando muertos, porque muchos de ellos son personas de alto riesgo que si les da el “coronabicho” no van a cargar los peregrinos.

Pero insistimos, ellos estarán compitiendo y no dejaran de llevar a cabo todo lo que la ley electoral les permita realizar para intentar ganar, es más, ya lo están haciendo desde este momento, porque gracias a la inoperancia del OPLE y el INE, México y Veracruz tienen influencia oriental porque es “China libre.” 

RIESGO INMINENTE

Si no se ajusta el proceso electoral a la emergencia sanitaria seguramente predominará el abstencionismo, porque nadie que tenga una persona de la tercera edad o con riesgos de salud, dejará a su familiar ir a exponer su salud y su vida en pro de la democracia; tampoco consideramos que cualquier otra persona en su sano juicio se arriesgue. Así es que los votantes serán en su mayoría los mismos que vemos conducirse de manera irresponsable en pachangas, eventos deportivos y reuniones sin aplicar ninguna norma de salud; son personas que se exponen a riesgos constantes y que, total, asistir a votar (si se les antoja) será uno más de los descuidos que viven cotidianamente.

QUE LES CAIGA EL VEINTE

Dos cosas deben entender nuestras flamantes autoridades electorales, la primera es que las campañas y las elecciones no pueden postergarse y la segunda que no se pueden llevar a cabo de la manera acostumbrada; porque si no lo han notado estamos pasando por un momento de riesgo inminente de contagios.

Hoy se dice que el incremento de casos de Covid son resultado de las fiestas decembrinas, sin que ninguna autoridad asuma su responsabilidad por no haber realizado una jornada de prevención eficaz; de la misma manera vamos enfilados para que después del proceso electoral nos salgan con lo mismo, reconocer la causa sin asumir su culpabilidad, una actuación negligente que raya en lo criminal.

Postdata: A mi entrañable amigo Rafael Martínez Zaleta, mis condolencias por el fallecimiento de su hermano y también amigo, Edmundo.