‘JUDAS Y EL MESÍAS NEGRO’, LA HISTORIA RACIAL CONTINÚA VIGENTE
|- La cinta que se estrena mañana cuenta la historia de Fred Hampton y el Partido Black Panther en su lucha por reivindicar los derechos de los negros.
CIUDAD DE MÉXICO.
En Estados Unidos, la raza y la brutalidad policial están estrechamente vinculados, y el fenómeno ha provocado una serie de disturbios raciales en los últimos años. En fechas recientes, los asesinatos de Breonna Taylor y George Floyd a manos de policías no han hecho más que avivar la llama.
Con eso en cuenta, la cinta Judas y el Mesías Negro (Judas and the Black Messiah), protagonizada por Daniel Kaluuya como Fred Hampton y LaKeith Stanfield como William O’Neal, bajo la dirección de Shaka King, parece adelantada a su tiempo
Judas y el Mesías Negro está basada en una historia real. A finales de 1960 surgieron explosivas manifestaciones contra las normas sociales y de género imperantes, la guerra de Vietnam y la injusticia racial.
En ese momento se comenzó a escuchar el nombre de Fred Hampton. Él se convirtió en el presidente en Illinois del Partido Black Panther (BPP), en 1968.
Lideró la lucha de esta organización por la libertad, por el poder de la autodeterminación y por el fin de la brutalidad de la policía y la matanza de negros.
Para muchos afroamericanos, Fred Hampton es un verdadero héroe por lo intrépido, temerario e imparable que era, aunque la gente siempre parece enfocarse en la forma trágica en que murió y no en la forma heroica en que vivió. Yo quise cambiar eso. La chispa inicial no era abordarlo como una película biográfica directa.
Me pareció que este thriller de infiltración en la sociedad era un gran concepto para la película, y me sentí increíblemente atraído por el personaje de Fred Hampton cuanto más me adentraba en él. Todos nos sentimos atraídos por su personalidad, su forma de hablar. Era inteligente, ingenioso y divertido”, dijo su director Shaka King al promocionar el filme.
Fred Hampton tenía 21 años cuando el FBI —con la ayuda de William O’Neal, un criminal menor— lo asesinó. En 1968, Fred Hampton —un joven activista carismático— se convirtió en el presidente del Partido Black Panther, en Illinois. Su lucha exigía la libertad, el poder para determinar el destino de la comunidad, el fin de la brutalidad policial y detener la masacre de afroamericanos.
Como presidente político, Hampton inspiraba a toda una generación a sublevarse contra la opresión, acto que lo puso directamente en la mira del gobierno estadunidense, el FBI y la policía de Chicago. Ellos debían terminar con esa revolución desde el interior.
Will Berson, coproductor de esta cinta, señaló que desde su perspectiva, Fred Hampton tiene un carisma similar al del expresidente Barack Obama.
Una de las cosas que me resultan más evidentes de Fred es el parecido que tiene con Barack Obama, aunque un poco más cargado a la izquierda por sus ideales, más progresista, un revolucionario. Era un orador brillante con una mente increíble. Estudió derecho y fue un activista comunitario en Chicago. Hay en su historia un desgarrador ‘qué hubiera pasado si (siguiera vivo)’”, señaló.
Ryan Coogler, otro de los productores de la cinta, destacó que Fred Hampton era un hombre con un talento tremendo para comunicar ideas que pudieran ser comunes no sólo para los negros, sino en personas cuyas voces no sintieran que fueron escuchadas.
Hampton tenía un talento único para hacer que ideas complejas fueran comunicables en un contexto sencillo. Parecía tener un enorme talento para conocer a la gente de su nivel y ser capaz de encontrar un terreno común sin sacrificar la individualidad de las personas. Evidentemente, tuvo un impacto en los afroamericanos, pero también en las personas que se encontraban en los peldaños más bajos de la sociedad y que no eran tomadas en cuenta.
Tuvo la previsión de abogar por cosas y plantear cuestiones que siguen siendo increíblemente relevantes a más de medio siglo de su asesinato: autodeterminación, atención médica, violencia policial, racismo sistémico, justicia económica y social. Buscaba la igualdad. Era un extraordinario pensador, orador y profesor. Este proyecto era justo el tipo de película que queríamos impulsar”, finalizó.
SOBRE EL PARTIDO BLACK PANTHER
En sus orígenes fue una organización creada para la autodefensa del pueblo negro, incitando a su población a ejercer el derecho constitucional de los Estados Unidos a poseer armas.
Entre sus acciones sociales destacan el programa de desayuno para niños, la habilitación de clínicas gratuitas para la población y la lucha contra las drogas. Impartían clases gratuitas de derecho y economía, autodefensa y primeros auxilios.
Desde 1967 el partido fue investigado, infiltrado y desbaratado por el Programa de Contrainteligencia del FBI, que desde 1969 lo consideró como uno de sus “objetivos principales”.
Las operaciones del programa del FBI destruyeron a los Black Panther con una serie de arrestos, asesinatos y destierros forzados, entre ellos el de Fred Hampton.
EL DATO
La cinta fue presentada dentro del Festival de Cine de Sundance
La película se realizó con un presupuesto de 26 millones de dólares. Desde su estreno en salas cinematográficas en Estados Unidos el 12 de febrero de 2021, ha recaudado cinco millones y medio de dólares