“El arte de vivir con esperanza”
VIVIR CON ESPERANZA
“El arte de vivir con esperanza”
Por Jacinto Rojas Ramos
La vida es la mejor escuela y que importante es aprender a vivir con esperanza.
La esperanza es una virtud caracterizada por la tendencia a descubrir más lo positivo que lo negativo y a ver o esperar lo mejor a pesar de las apariencias.
La esperanza es una forma positiva de captar la realidad y lo que me parece más importante es lograr ser una persona positiva, esto es algo que se aprende, es una tarea personal que lleva tiempo. Es decir, que no es algo genético, sino adquirido. Y en ello la vida es la gran maestra porque nos permite ir acumulando experiencia, un saber acumulado de acontecimientos de muchos años que forman un magma en nuestro subsuelo y nos muestran unas lecciones rotundas.
Vivir con esperanza es una pretensión que se alcanza teniendo la idea en la cabeza de que todo puede mejorar, por muy adversos que sean los acontecimientos personales. Así, la persona con esperanza, propone soluciones buscando alternativas y atajos que lleven a un paisaje mejor.
En este contexto tener un pensamiento positivo, especialmente cuando se vive en la adversidad, no es cosa fácil. Algunas recomendaciones para vivir con esperanza:
1. Por debajo de los acontecimientos negativos, se esconde una carta buena que toca a cada uno descubrir. Se necesita querer y paciencia. Lo primero es determinación; lo segundo, saber esperar y saber continuar.
2. Hay que levantar la mirada y dejar lo inmediato por lo mediato. Esa es la mirada inteligente.
3. Hay que aprender a confiar ante las dificultades. Nada de derrotismo o victimismo.
4. El hombre con esperanza es un luchador nato. No se viene abajo cuando las cosas se ponen difíciles o no salen como él esperaba. Si se practica la perseverancia, poco a poco se convierte en una segunda naturaleza.
La vida es como la navegación a vela. El pesimista se queja del viento. El optimista espera que cambie. Y el realista, que vive con esperanza, ajusta las velas.
El momento que vivimos viene a ser entonces, una extraordinaria oportunidad de aprender a vivir con esperanza. No hay obstáculo que pueda superarnos si comenzamos a enfrentar los problemas y retos con optimismo, esto es, de modo positivo. Al final del día, descubriremos que efectivamente lo que la vida nos presenta como difícil, sirve para superarnos y crecer, para madurar y llenarnos de sabiduría, por eso, el arte de vivir con esperanza.
Aprendamos a vivir con esperanza y compartamos lo aprendido con los demás, especialmente con aquellos que se hunden en el mar de las adversidades.
rrjacinto_9@hotmail.com
