CINTHYA LOBATO: MÁS DE 30 AÑOS CON REZAGO EN XALAPA
|60 SEGUNDOS
RAUL GONZALEZ RIVERA
CINTHYA LOBATO: MÁS DE 30 AÑOS CON REZAGO EN XALAPA
La ex diputada Cinthya Lobato Calderón, xalapeña de nacimiento por los cuatro costados, asegura que se propondrá como alcaldesa de la ciudad, acabar con el rezago que padece la capital del estado de Veracruz, ya por espacio de más de 30 años.
Es el momento de las mujeres y seguramente la dama está presumiendo que las integrantes de su género han avanzado y bien, pero confía en que de esta jornada preelectoral saldrá adelante y con un mayor fortalecimiento, llegó la hora de las féminas porque como gobierno de la localidad, deberá sumar al grueso de aquellas que están esperando la oportunidad de servir con lealtad a los demás.
Cinthya ha dicho en esta justa, que confía en el apoyo que las mujeres deberán rendirle a su candidatura. En su caso, de conquistar la presidencia municipal, no habría reparto de puestos públicos entre membretes partidarios. En el partido unidad ciudadana tienen cabida todas y todos los xalapeños, así que un triunfo de Cinthya alcanzaría a las grandes mayorías, que siguen a la espera de que la ciudad sufra una verdadera transformación.
Como es sabido, la capital sigue a la espera de su rescate desde hace cuando menos tres décadas. Su abandono es objetivamente visible en lo económico en su estructura desvencijada y el abandono por parte de la autoridad municipal, en lo que hace a la prestación de los servicios públicos. Estos son caros y malos. Sin duda, es de las capitales de estados del interior de la república con mayores rezagos y abandono
Es muy importante, que la aspirante sea mujer y originaria de la otrora Atenas de Veracruz, dado que hay una ciudadanía que en forma mayoritaria conforman las mujeres. La empresaria Lobato Calderón, llama a sus iguales a sumarse junto con los hombres en este gran proyecto, que encabeza la también empresaria y exdiputada local. No teme en esta contienda que los varones lleven una presunta delantera, debido a que los xalapeños están conociendo un proyecto joven, pero maduro y de primera mano.
La ciudadanía sabe y conoce la trayectoria de quienes ya fueron ediles y rindieron lo que la gente sabe, es decir, en una segunda vuelta, la gente sabría identificar plenamente los alcances y debilidades de quienes ya fueron autoridad, pero dejaron sin resolver una problemática que se alarga en el paso del tiempo hasta por más de 30 años. Un rostro nuevo, llama a refrescar una contienda electoral y más, cuando existen candidatos que ya anteriormente representaron políticamente a la municipalidad, pero sin duda, lejos quedaron de trascender porque la obra prometida, no la cumplieron.
La que fuera Atenas veracruzana, padece graves conjeturas sociales, económicas, de salud pública y de violencia e inseguridad. Los problemas que arrastra la mugre y la falta de servicios de recolección de basuras puntuales, como la deficiente atención a usuarios de lo que concierne a la distribución del agua potable, afectan en fea forma a los xalapeños, que no habían resentido sus consecuencias como ahora, cuando menos en 50 años atrás. Esperemos.
BUROCRACIA SE IMPONE EN LA TALA DE ARBOLES AÑOSOS
Increíble y poco menos que burocrática es la tarea que realiza el personal de la dirección de protección civil en cuanto se trata de árboles añosos, podridas sus raíces o que se estén cayendo sus ramas, que se encuentren dentro de los domicilios particulares, porque se deslindan de la responsabilidad de coadyuvar en su tala, aduciendo que esa labor corresponde ejecutarla a los ciudadanos, o a la autoridad municipal.
Vea usted lo ridículas que son las autoridades del rubro antes mencionado. La ciudadana dueña de la casa en cuyo patio un enorme ahuehuete, está por caerse, llama telefónicamente a “protección civil” para pedir su concurso, porque si usted tira su árbol, le cae la policía municipal, pueden llevárselo a prisión y aplicarle una elevada multa, por haber acometido osadamente contra el medio ambiente, llevando a cabo la tala de un árbol.
En un mensaje telefónico, la solicitante del apoyo técnico de protección ciudadana, se insertan los datos tradicionales de la persona, su domicilio y sus generales, porque toda tala requiere de un permiso “institucional”, o se expone a tener que pagar una multa. Empero, los trabajadores de jardinería municipal, pueden realizar talas en las calles, más no en el interior de las viviendas particulares.
Es decir, si usted corta un árbol, sin la autorización municipal. Se expone a ser detenido y multado. Si cubre los requisitos que solicita protección ciudadana, cabe la expectativa de que a través de un oficio le manifiesten a la solicitante, que le den el “permiso” para talar un ejemplar añoso, sus ramas y talos podridos.
Total, toda una encrucijada, provocada por la autoridad municipal, ayuna de interés por resolver una problemática que debe ser de seguridad y no precisamente, que esté contrariando el medio ambiente.
Sin embargo, la maldita burocracia se antepone, ya que si ocurre una desgracia en que se ponga en juego una construcción o una persona en lo individual, entonces dirá la autoridad que no fue consultada, porque sus sagaces jardineros, pudieron haber evitado semejante tragedias. en aras de proteger el “cambio climático” serían capaces de inventar cualquier otro pretexto, para no acudir a una cita con su responsabilidad presumible.
Cuando salen cuadrillas de jardineros, con intenciones de rehabilitar parques y jardines en avenidas, dicha labora la llevan a cabo, solamente en las áreas del primer cuadro de la ciudad, no a las colonias ni a la periferia, en donde se levantan verdaderas montañas de yerbas, zacateas y árboles caídos.
Si se trata de talar árboles en los domicilios particulares, los ciudadanos deben rascarse con sus propias uñas, aunque para poder llevar a cabo dicha faena, debe autorizarlo todo un señorón de la trinchera burocrática, don Magdaleno Mendoza Hernández, jefe de biodiversidad y cambio climático, del ayuntamiento de la 4T, personaje, el cual, por sus cojones, si quiere autoriza o no a sus moradores dicha tala, total que si el árbol cae sobre los tejados de la casa y lastima a sus habitantes que se hundan ellos, no la autoridad. Cuentan los malvados.
BASURA Y JARDINERÍA PÚBLICA, ASUMEN GRATAMENTE SU LABOR
Insólitamente los jardineros y recolectores de basuras, en días de campañas políticas están cumpliendo con sus labores al cien, en una ciudad repleta de montoneras de porquerías y de espacios y áreas verdes repletos de yerbas.
Xalapa está hundida desde hace años en el más lacerante abandono. Los habitantes que dieron lugar al Xalapa original se duelen seguramente de cuanto está sucediendo con su histórica capital.
Calles repletas de baches, basuras y jardines sin podar, árboles cayéndose por el paso de los años y de un mantenimiento que ahora se sabe que no se realiza, aun en periodos de lluvias, secas o bastante sol.
Sin embargo, a últimas fechas, no obstante, se dice popularmente que las campañas políticas que promueven candidatos a alcaldes, diputados locales y diputados federales, han provocado que las oficinas de palacio municipal se pongan a trabajar, la gente del pueblo confía en que dicho cometido se continúe inclusive una vez concluido el proceso electoral.
Vecinos de la colonia María Esther, están satisfechos con la respuesta que brinda limpia pública, al enviar todos los días el camión recolector de basuras, cuya labor, la realizaban solamente cada ocho días, dejando la tarea mencionada a las motocicletas con góndola y que en los últimos meses cubrieron la ausencia de las unidades recolectoras del ayuntamiento de la ciudad, previa entrega de la gratificación al ejército de jovencitos, que suelen conducirlas todos los días por las arterias públicas de la ciudad.
El estado que guarda la mayoría aplastante de calles y avenidas, es de lamentarse porque el fenómeno ocurre en colonias céntricas y periféricas por igual. El abandono de la ciudad a decir de Cynthia Lobato, David Velasco y Raúl Arias Lovillo, se remonta a cuando menos tres décadas atrás. Los tres aspirantes a la presidencia municipal, están convencidos de que la capital, está urgida de un cambio radical, para no seguir quedando entre las últimas capitales de estados del interior del país, que más padecen los rezagos y olvido de parte de las instituciones públicas.
Cierto es que el cierre de negocios alcanza las 30 mil firmas empresariales chicas y grandes, así como el anuncio diario de viviendas y edificios de que se venden o rentan, imponen a la ciudad un sello que jamás había experimentado. Los candidatos a la alcaldía se comprometen a brindar una sacudida a la capital, con la mira de rescatarla y colocarla en el escenario, donde solo algunas ciudades capitales, lucen exitosamente.
Si a todo esto, añade usted, el deplorable servicio de transporte público existente, a nadie cabe la menor duda de que su ciudad sufre de un atraso monstruoso. Las unidades del servicio urbano exhiben una situación de crisis y pobreza, que solo se avistaba en los países de regímenes socialistas con hambruna de los años 40 del siglo XX. El taxi no se diga, los llamados libres apestan, deslucen por lo sucio que se encuentra una mayoría y sus choferes, son improvisados, carecen del mínimo conocimiento sobre la ciudad y sus arterias públicas. Empero, es el Xalapa de estos momentos, qué más da. Es todo.