La “Ciudad de Oportunidades” sigue atrayendo inversionistas

  • Eso significa más oportunidades de empleo y dinero circulante, para el comercio.  

Amadeus Olivarex

Martínez de la Torre, Ver.

Demolido fue en la presente semana, el edificio que por mucho tiempo albergó a la empresa Elektra, junto con el Banco Azteca, en la avenida Melchor Ocampo, entre las calles Matamoros y Guerrero, lo que se traduce en nueva inversión, para ésta “Ciudad de Oportunidades”, prueba además de que las consecuencias financieras derivadas de la crisis económica impuesta por el COVID19, para unos es desgracia y para otros, oportunidades de negocio.

Por lo que hace a Elektra ocupa ahora el inmueble que por años cobijó a una tienda departamental, ubicada en la esquina de Maximino Ávila Camacho y calle Mina, con el éxito de siempre, pues se trata de una firma comercial de gran extensión, fuerte capital y sistema administrativo a toda prueba de siniestros, caso de la pandemia que se niega a irse de nuestro territorio nacional.

De la misma manera, otros negocios menores, sobre todo micro y pequeñas empresas, han tenido que cerrar sus puertas, debido al desastre financiero que impera en el país, particularmente entre la clase media hacia abajo, cumpliéndose la ley del capital que da por resultado unos más ricos de lo que estaban y otros más pobres de lo que eran.