UNA MAYORÍA DE ESTUDIANTES SIGUE EN CLASES POR MEDIOS ELECTRÓNICOS
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RAUL GONZALEZ RIVERA
UNA MAYORÍA DE ESTUDIANTES SIGUE EN CLASES POR MEDIOS ELECTRÓNICOS
En la aldea local y seguramente en el resto de la entidad veracruzana, los estudiantes de las escuelas primarias, secundarias y preparatorias que acudieron a recibir clases presenciales, fueron los menos, mientras en aulas universitarias, no hubo uno solo de sus alumnos, y prefieren continuar asistiendo con sus académicos a través de los medios electrónicos.
Ya por espacio de dos días, los edificios de las escuelas se aprecian desiertos, si acaso algunos trabajadores de limpieza, muestran tedio y aburrimiento a sabiendas de que se apresuraron días antes, para limpiar salones, corredores, jardines y patios de los planteles más conocidos de esta capital.
Como noticia, se difundió que la asistencia de estudiantes a la escuela secundaria técnica No. 3 fue muy importante, aunque se integró de pocos jovencitos que dieron así cumplimiento con su cita. Igual, los académicos, quienes confiaron en que algunos más prefieren continuar impartiendo clases a través de la internet, bajo la premisa de que está prohibido-prohibir, como lo hacen constar autoridades del orden federal de manera frecuente.
La carta compromiso que con antelación se había difundido que firmarían los padres de familia, quedó reducida a la nada. Padres de familia que prefieran que sus hijos reciban clases por medios electrónicos, bienvenidos serán, como también aquellos que hayan decidido acudir a las clases presenciales.
La pandemia no cesa en sus alcances y daños que causa a la sociedad mexicana. Especialistas de la medicina refieren que el problema de salud pública, sigue, no hay un término para determinar que ya pasó y los exhortos que sigue lanzando a la gran masa de mexicanos, es en el sentido de que se continúen manteniendo las mismas medidas de protección a la salud de cada connacional, consistentes en mantener una sana distancia, lavarse las manos constantemente y portar mascarilla, que le cubra boca y nariz.
La tercera ola de la pandemia, no ha concluido, los esfuerzos institucionales no han podido ir más allá de aplicar las vacuna a poco más del 55 por ciento de la población nacional, calculando la coordinación sanitaria que representan el doctor Javier Alcocer, secretario del sector salud y el doctor Hugo López Gatell, responsable directo en la difusión y atención de las medidas y cuidados contra la epidemia y la proliferación de contagios, que se aplica la suma de esfuerzos institucionales, para contener la incidencia de más enfermos y fallecimientos por el coronavirus.
Lamentablemente, en todo el mundo persiste la enfermedad y no hay país, poderoso o no, que pueda anunciar la terminación de esta pesadilla, a la cual, por esta vez millones de jóvenes y niños se resisten a enfrentar la epidemia asistiendo personalmente a recibir sus clases, en sus planteles correspondientes.
En México, el presidente Andrés Manuel López Obrador ha apuntado en repetidas ocasiones que lo deseable es la vuelta a clases presenciales, con el objetivo de que los niños y adolescentes socialicen y no persistan en su encierro, porque emocionalmente, es indispensable que tengan convivencia con compañeros y sus maestros. Porotro lado, también ha dicho que la asistencia o no a la escuela, es voluntaria. Esperemos.
SI AMLO QUISIERA, XALAPA PODRÍA VOLVER A TENER BEISBOL PROFESIONAL
Si el presidente Andrés Manuel López Obrador quisiera. Xalapa podría ser una de las plazas que bien podrían ofrecer béisbol de grandes ligas, con jugadores mexicanos que lucen dentro y fuera del país, habida cuenta de que aquí cuenta con un parque estupendo y la afición local al rey de los deportes, no se puede negar.
En el pasado, un hermano de Carlos Brito pretendió ofrecer beisbol de liga mexicana, pero apenas aguantó la nómina que cobraba un selecto grupo de peloteros.
En otro momento, el alcalde Américo Zúñiga, anunciaría que Xalapa contaría con una novena de grandes jugadores traídos de los equipos de la liga mexicana, radicados en la ciudad de México. Sin embargo, todo quedó en proyecto. La afición xalapeña, ha gustado de siempre por el rey de los deportes.
Empero, cabe recordarlo, la capital del estado rico pero repleto de pobres, ya presentó un equipo de grandes ligas, durante una temporada invernal, bajo patrocinio del gobernador Antonio M. Quirasco, fanático sin tache del béisbol, que no se perdió de acudir a presenciar cada uno de los encuentros que sostuvo el equipo “Chileros de Xalapa” contra “Pericos de Puebla”, “Petroleros de Poza Rica”, “Cafeteros de Córdoba” y “El Águila de Veracruz”.
El trabuco, que Xalapa,ostentó en aquel sexenio gubernamental nunca antes ni después volvió a contarlo, como un verdadero espectáculo, que atraía a multitudes entre niños, adolescentes, jóvenes y adultos. El gobernador Quirasco, era vitoreado en cada “choque” en el parque deportivo Colón, convertido en esos años, en un escenario, donde contendían jugadores de la liga mexicana y otros más de las ligas mayores.
La novena histórica, que defendió los colores de Xalapa, la memorizan todavía los asiduos al béisbol de la liga invernal, es la siguiente: Luis “Pasitos” Echeverría y Rubén Esquibias, compartían la primera base, ambos pertenecían a la plantilla del Tigres de México; Roberto Avila González y Vinicio García, compartían la segunda base; Mario “Papelero” Valenzuela, cubría la tercera almohadilla y Miguel Becerril Fernández, se encargaba de hacer la defensa en short stop.
Ernesto Terán, el único xalapeño de nacimiento, Felipe “El Cliper” Montemayor” y Mario Ariosa, se encargaron de los jardines izquierdo, central y derecho, respectivamente.
Lanzadores de lujo, sin duda, Ramón Arano, Tomy Herrera, Luis Tiant y el xalapeño también Enrique Castillo.
Como catchers, lucieron las estrellas nacionales del mascoteo, detrás de home Pilo Gaspar y Roberto Palafox. En otro momento, tomaron parte del poderoso equipo local, los cubanos Santos Amaro como manager y su hijo Rubén Amaro, procedente de “Los Indios de Cleveland”, se encargaría de cuidar la segunda almohadilla.
Este era un equipo de lujo, todos sus peloteros de la liga mexicana y varios de ellos con cartas de haber jugado en ligas mayores.
Obviamente, la fanaticada no se perdía cada una de las contiendas que se registraron en terrenos del parque deportivo Colón. Tal vez, si el presidente de México quisiera brindar a los aficionados locales, una novena como aquella de los Chileros de Xalapa, júrelo usted, que vendría como anillo al dedo, de propios y ajenos. Esperemos. Lo anterior a propósito de que en algunas plazas de la república, se viene fomentando la práctica del rey de los deportes. Al tiempo.
EN OTROS TIEMPOS, TAMBIÉN HABÍA AGENTES DE TRÁNSITO PIRATAS Y LA ODIOSA BUROCRACIA
No se quiere saber que aun en esta época de limpia de corrupción en el país, sigan dándose los agentes de tránsito “piratas” como sucedió en trienios municipales y alguno que otro sexenio de corte priista.
Un taxista, invitado en algún momento para convertirse en agente vial pirata, nos comentó que cuando lo invitaron, apenas si podía creerlo. Creyó inicialmente que se trataba de una puntada de políticos, o una canallada a la cual de antemano no se prestaría el personaje, todo un servidor del volante, respetuoso y que aplica las tarifas según el bolsillo de sus usuarios y clientes.
En aquella ocasión, nos dice el cumplido prestador de servicios a usuarios y pasajeros, que, conocía a un poderoso alcalde y se acercó a él, para solicitarle su bendición y que le brindara alguna oportunidad de trabajar como chofer en limpia pública u obras públicas.
Empero, lo que le respondió el edil potentado, lo dejaría de una sola pieza. Este le dijo: mira te doy la chamba de agente de tránsito “pirata”, a lo que el taxista de inmediato se opuso e increpó diciéndole enseguida ¿y eso cómo se come?….Verás, le responde el alcalde: “te doy un uniforme, una placa, un tolete y una credencial de guardián del tránsito de vehículos, además un legajo de recibos en blanco y lo único que tienes que hacer es levantar cuando menos cuatro infracciones diarias”.
Estas infracciones, las debía partir en cuatro partes, es decir el número de beneficiarios para los cuales tendría que hacerla de agente “pirata”.
Al paso de los años, el conductor de taxi, refiere que nunca se prestó a esa maniobra, pero que existió y considera que tal vez se siga practicando. Son vicios que no son fáciles de erradicar de una oficina pública, menos la que se dedica a los rubros de tránsito.
Nomás cuántas vueltas tiene que dar un conductor que haya perdido su licencia de manejo, cuántos pagos, por qué hacerlos y por qué no se registran en oficinas de la hacienda pública, teniendo abierta una caja de la instancia citada, en la fila de ventanillas de atención a los ciudadanos en linderos de tránsito del estado y transporte público.
Si usted perdió o le robaron su licencia de conductor, ha de iniciar un peregrinaje, que le llevará pérdida de tiempo y enfrentar caras duras, inflexibles de la mayoría de servidores públicos. Primero debe ir a poner la denuncia en la fiscalía de rigor, la cual obviamente no va a investigar nada. Antes debió ir al módulo que expide las licencias, donde le entregarán un formato con los datos históricos de su licencia perdida o robada y posteriormente, con el registro de su querella ante la fiscalía, encaminar pasos hacia oficinas centrales de transporte público.
Allí deberá formarse en una cola que diariamente es de muchos, bajo los rayos candentes del sol porque ahora sus encargados despachan en la calle no en sus oficinas, revisa un responsable la papelería que le dieron como relicario a cumplir y le extiende un recibo, que ha de pagar por el duplicado de su licencia, no en la caja de la hacienda pública,
sino en alguno de los establecimientos comerciales más cercanos del rumbo.
Ya con dicho recibo pagado, debe regresar a la mesa de rigor, vuelve a formar cola y cuando llega su turno, entrega la boleta de pago y en respuesta, la responsable del rubro, le espeta a saber esperar una semana, ya le hablarán telefónicamente, le refieren, aunque no es cierto y vuelve personalmente, para que le hagan entrega de la autorización de rigor, previa auscultación de que está libre de gravámenes y posibles multas.
Va de regreso al módulo de licencias, con el legajo de documentos ya autorizados y pagados, para los cual hay tres despachos, uno en la avenida 20 de Noviembre, que en mala hora, cerró por dos días, porque sus empleados se contagiaron de covid 19; en la avenida Manuel Avila Camacho, ese día, los empleados no estaban de humor y le dicen al solicitante del duplicado de su licencia de conductor, que vaya mejor a la plaza Museo, que allí, no tienen gente.
En efecto, el peregrinaje lo concluye el ciudadano común yendo a las oficinas de plaza museo, donde le toman la temperatura y le llenan la diestra de gel, pasa a la ventanilla que le indique el mofletudo guardián de la entrada y se aposta de cara a la empleada que nunca levanta la vista, pero le sugiere al ciudadano que espere, que está revisando sus papeles, los cuales una vez que dice la mencionada funcionaria, que están en orden, le pide que pase a una ventanilla más.
En esta última etapa, de la travesía que cubrió el común ciudadano, por espacio de ocho días cuando menos, para poder obtener un duplicado de su licencia de conductor extraviada o robada, le imprimen una fotografía, la cual debido a los avances de la tecnología, queda impresa en su nueva licencia.
Por cierto, el último trabajador del módulo, suele ser mucho más atento que cualquiera de los que antes tiene que entrevistar el ciudadano que obviamente carece de influencias y en todas las instancias debe tener atole en las venas y hacer como que la Virgen le habla, para aguantar las odiosas tramas de una burocracia que en el ayer y ahora sigue siendo iguales.
Tal vez, la 4t tome nota y vea como modificar tantas vueltas, colas y malas caras, amén de que mucho dinero se tiene que pagar por servicios los cuales en estricta justicia social, debían gozar de gratuidad. Por favor. Es todo.