Vox populi en redes sociales Entre el miedo y el autoencierro la vida se desperdicia

  • Y es que el humano es un ser social que se conduce bajo dos emociones.             

Amadeus Olivarex

Martínez de la Torre, Ver.

Hay quienes le dan la razón a quienes vía redes sociales manifiestan que la vida se desperdicia entre el miedo al contagio de COVID y el autoencierro, precisamente para evitar dicho contagio que en algunas personas ha resultado mortal y en otras no tanto, sobreponiéndose a la crisis corporal que genera el virus y han vivido, para contarlo.

Sin embargo, el coronavirus no muere, simplemente muta, se transforma, busca hacerse más fuerte, lo que han corroborado científicos chinos, que, tras seguimiento a contagiados sobrevivientes, han constatado que a lo largo de un año han continuado los desequilibrios en cuestión de salud en tales personas y en lo que no dejarán mentir quienes en Martínez de la Torre aun padecen esos estragos.

Postura que algunas personas están adoptando, luego de más de 20 meses de temor, de sufrir el ataque del coronavirus y de recibir la vacuna que el sector salud ha venido aplicando, por lo que actualmente el anuncio de la nueva cepa de COVID, el Ómicron, optan por asumir una actitud de más valor, reforzando las medidas preventivas, pero evitando en lo posible el autoencierro, para recuperar su vida social y laboral, sobre todo.

Lamentando que, por la falta de uso y la exposición a las condiciones climatológicas, gimnasios al aire libre, que son los que ahora se requieren, se encuentren dañados, como resultado del abandono en su uso, pero se plantean la alternativa de la ejercitación mediante la técnica de zumba o la caminata, porque la oxigenación de la red sanguínea es vital de inicio a fin de todo ser viviente.