EL CIUDADANO

•  “Juntarse es un COMIENZO. Seguir juntos es un PROGRESO. TRABAJAR JUNTOS ES EL ÉXITO”. HENRY FORD.

Amable lector lo saludo con especial afecto este 14 de febrero del 2022, en que celebramos el DÍA DEL AMOR Y LA AMISTAD. Pudiera hablarle a manera de efemérides de la Matanza de San Valentín llevada a cabo en la Ciudad de Chicago en el año de 1929, pero resulta más de mi agrado hablarle del origen del personaje de VALENTÍN, cuyo origen se sitúa en la Roma del siglo III, cuando el cristianismo comenzaba a extenderse. En esos momentos gobernaba el emperador Claudio II el Gótico, que promulgó una ley por la cual prohibía casarse a los jóvenes para que pudieran alistarse en el ejército.

Al no estar de acuerdo con dicha ley, un joven sacerdote llamado Valentín, decidió desafiar la prohibición del emperador y empezó a celebrar matrimonios en secreto entre jóvenes enamorados, además de lograr que muchos se convirtieran al cristianismo y asistir a los presos antes de ser torturados y ejecutados.

Tras ser descubierto, Valentín fue arrestado y confinado en una mazmorra, donde el oficial encargado de su custodia le retó a devolverle la vista a su hija Julia que había nacido ciega. El joven sacerdote aceptó el reto y en nombre de Dios devolvió la vista a la joven, con lo cual logró que el oficial y toda su familia se convirtieran al cristianismo. A pesar del milagro, Valentín siguió preso, y el 14 de febrero del año 269 fue lapidado y decapitado. La leyenda cuenta que Valentín, enamorado de Julia, envió una nota de despedida a la muchacha en la que firmaba: «De tu Valentín», de ahí la expresión anglosajona con la que se firman las cartas de amor: «From your Valentine». Julia, agradecida, plantó un almendro que dio hermosas flores rosadas junto a la tumba de su amado, de ahí el simbolismo de este árbol para expresar el amor y la amistad duraderos.

La vida siempre nos muestra opciones a elegir, en mi caso opté por compartirle una historia de amor que posiblemente usted no conocía, en vez de contarle una historia sangrienta que estoy seguro que usted ya había escuchado.

Este largo preámbulo que he utilizado con motivo del día de San Valentín, me permite invitar respetuosamente a nombre de todos los ciudadanos a nuestros actuales servidores públicos municipales (alcaldes, Síndicos y Regidores), para que realicen un trabajo de excelencia de cabildo con la mayor productividad y dentro del marco de legalidad y profundo respeto, bajo los principios de Eficiencia, eficacia, Honradez y lealtad y con los valores de tolerancia y capacidad de negociación.

Comprendemos que todos los servidores públicos elegidos por voto popular tienen como valor preponderante, velar por los intereses del pueblo que los eligió y jamás anteponiendo los intereses personales. Por ello deben hacer a un lado sus pretensiones personales y actuar con humildad y transparencia, dicen que el amor es el motor que mueve el mundo así que… ¡Feliz Día de los Enamorados! Y no olvide ser UN CIUDADANO PROFESIONAL. Hasta la Próxima.