MÉXICO NO ES HONDURAS…TODAVÍA
|AL PIE DE LA LETRA
Raymundo Jiménez
MÉXICO NO ES HONDURAS…TODAVÍA
Una de las reglas no escritas del presidencialismo mexicano posrevolucionario que aún parece estar vigente es que ningún mandatario encarcelará a su antecesor.
Con la llegada de Andrés Manuel López Obrador a la Presidencia de la República, muchos de los 30 millones de ciudadanos que votaron por él en 2018 creyeron que por fin se castigarían los abusos de poder y corrupción de las gobernantes del PRI y PAN que le antecedieron.
Sin embargo, hasta hoy, todo parece indicar que pese a su discurso en contra de la corrupción y crímenes del pasado, el líder de la Cuarta Transformación tampoco barrerá para atrás.
Este martes, el diario Excélsior publicó que la Fiscalía General de la República señaló solamente a Emilio Lozoya Austin, exdirector de Pemex, y a su madre, Gilda Margarita Austin y Solís, como los únicos beneficiados y, por lo tanto, culpables, en el pago de un soborno de 10 millones 500 mil dólares de la empresa brasileña Odebrecht.
La FGR no imputó al expresidente Enrique Peña Nieto ni a los exsecretarios de Hacienda, Luis Videgaray y José Antonio Meade, mencionados también en esta trama de corrupción.
Según el diario capitalino, desde el pasado 3 de enero la FGR presentó las conclusiones del caso al juez de Distrito Especializado en el Sistema Penal Acusatorio, del Centro de Justicia Penal Federal con sede en el Reclusorio Norte, que actúa como juez de Control.
De acuerdo con esta versión periodística, el Ministerio Público Federal está solicitando para Lozoya Austin 46 años y 6 meses de prisión, más el pago de 7 mil 950 días de multa, equivalentes a 87 millones 252 mil 442.50 pesos.
Y, para su madre, 21 años y 3 meses de cárcel, además del pago de 4 mil 50 días de multa, equivalentes a 262 mil 278 pesos.
Las investigaciones corresponden al expediente FED/SElDF/CGl-CDMX/0000117/2017, a cargo del titular de la Fiscalía de la Unidad de Investigaciones B, en la CDMX, Kristián Javier Jiménez Hernández.
Lozoya también enfrenta cargos de asociación delictuosa, por el que se piden 10 años de prisión y 300 días de multa; cohecho, con 14 años de cárcel y 150 días de multa, y operaciones con recursos de procedencia ilícita, con sanción de 22 años de prisión y 7 mil 500 días de multa.
A su madre le imputaron cargos de asociación delictuosa, con 10 años de cárcel y 300 días de multa, y operaciones con recursos de procedencia ilícita, con una sanción de 11 años y 3 meses de cárcel y el pago de 3 mil 750 días de multa.
En cambio, en Honduras, fue detenido anteayer el expresidente Juan Orlando Hernández, quien es reclamado por Estados Unidos por sus presuntos vínculos con Joaquín “El Chapo” Guzmán, del Cártel de Sinaloa, pues desde febrero de 2021 la Fiscalía de Nueva York había confirmado la existencia de una investigación por narcotráfico contra el exmandatario centroamericano, cuyo hermano, Antonio Hernández, ya fue condenado a cadena perpetua por narcotráfico.
¿En México pronto veremos al primer expresidente en prisión?