Contaminación y deforestación devora al arroyo Pedernales

  • Para información de los incrédulos, ya estamos inmersos en la guerra por el agua. 

Amadeus Olivarex

Martínez de la Torre, Ver.

En el medio rural, prevalecen dichos populares tan acertados, como el de que “para muestra, con un botón basta”, caso aquí del arroyo Pedernales que día a día va siendo devorado por la contaminación y deforestación que no disminuye, sino por el contrario es un problema que se complica más y más.

Al presente mes, la Comisión Nacional del Agua reporta un total de 530 municipios en el país, afectados por la sequía, cuando apenas comienza la temporada de primavera, mismos que se ubican en entidades como Baja California, Durango y Jalisco; lista donde no aparece Nuevo León que está demandando agua del río Pánuco, en Veracruz, ante lo que brota descontento popular y por lo que se dice no permitirán que ese proyecto prospere.

Al momento, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ha precisado que dicho proyecto, promovido ahora por el gobernador de Nuevo León, Samuel García, no podrá consumarse, pues data del gobierno de Enrique Peña Nieto y desde antes ya estaba cancelado, por inviable, como consecuencia del clamor popular. Y es que ríos cercanos al Pánuco, como el de Poza Rica se han convertido en vil y pestilente lodo.

Pero el tema no está cerrado, ya que tras el anuncio de destinar el gobierno federal 2 mil millones de pesos, para rescatar de la sequía a Monterrey, Nuevo León, y eso a partir del año 2024, vienen las presiones políticas y electorales que, precisamente para ese año, definirán la suerte de la 4T, en las urnas, para elegir nuevo presidente de la república, entre otros cargos, en ese nivel de gobierno.