¿Sientes una flema en la garganta que nunca se quita? ¡A esto se debe!
|¿Sientes una flema en la garganta que no se quita por más que tosas? Para poder solucionarlo primero hay que determinar a qué se debe, ¡aquí descubrirás algunas causas!
Cuando tu cuerpo produce tanta flema que te la pasas tosiendo una sustancia espesa y pegajosa, puede ser frustrante. Sin embargo, la mucosidad es realmente vital para una buena salud.
No obstante, si la producción excesiva de mucosidad está obstaculizando tu vida cotidiana, existen opciones de tratamiento efectivas. Y comprender la razón por la que tu cuerpo produce demasiada mucosidad en la garganta puede ayudar a determinar el tratamiento adecuado.
¿Por qué siento flemas en la garganta y no las puedo sacar?
Una sobreproducción de moco es provocada por una amplia gama de afecciones, incluidas infecciones bacterianas, virales, alergias y enfermedades pulmonares.
Alergias
Las alergias pueden causar picazón en los ojos, estornudos, congestión, opresión en el pecho, secreción nasal y tos.
Cuando tienes una reacción alérgica a un alimento o algo en el ambiente como el polvo, el polen o la caspa, tu sistema inmunológico se acelera para producir moco que ayudará a expulsar el irritante.
Asma
Los síntomas del asma incluyen dificultad para respirar, dolor en el pecho y tos, que puede ser seca o húmeda con flema.
Si está húmedo con pequeñas cantidades de mucosidad blanca o transparente, esto es una señal de que tus vías respiratorias se han inflamado. Por otro lado, si toses flema espesa con regularidad, esto podría ser una señal de que tienes una infección bacteriana que requiere atención médica.
Reflujo ácido
El reflujo ácido ocurre cuando el ácido del estómago sube por el esófago y se asienta en la parte posterior de la garganta.
Esta afección irrita la garganta y provoca una producción excesiva de mucosidad en la garganta y las fosas nasales, lo que provoca una sensación de goteo posnasal, ya que el esófago intenta eliminar el ácido.
Enfermedades pulmonares
La enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) es un término amplio para una serie de enfermedades pulmonares que pueden dificultar la respiración.
La bronquitis crónica y el enfisema se incluyen en la EPOC y generalmente son causados por la exposición prolongada a sustancias que irritan los pulmones, específicamente el humo del cigarrillo.
Consumo de cafeína, alcohol y tabaco
La cafeína, que se encuentra en el café, el té negro y las bebidas energéticas, puede provocar deshidratación, lo que puede contribuir al espesamiento de la mucosidad producida por las células de las vías nasales y respiratorias.
El consumo excesivo de alcohol puede dañar el sistema de transporte mucociliar, que funciona para eliminar la mucosidad de las vías respiratorias. Cuando está dañado, tu cuerpo tendrá dificultades para regular la producción de moco.
El humo del tabaco puede irritar los pulmones y causar una variedad de síntomas que incluyen dolor en el pecho, sibilancias y tos.
Infecciones
Las infecciones bacterianas y virales como la influenza, la bronquitis y la neumonía pueden hacer que las vías respiratorias produzcan mucosidad adicional, la que puede ser de color verde o amarillo. Toser o expulsar una mucosidad roja por la nariz es una señal de que se ha mezclado sangre.
Es posible que el tejido que recubre la nariz o la garganta se haya irritado por limpiarse, frotarse, toser o sonarse demasiado.
¿Cómo eliminar mucosidad de la garganta?
Existe una variedad de remedios caseros efectivos que pueden aliviar los síntomas cuando se produce mucha mucosidad.
Puedes incorporar los siguientes remedios caseros a lo que tu médico te recete para la afección que tengas:
Come sopa de pollo, ya que reduce la inflamación asociada con la congestión nasal y los resfriados. También puede prevenir la migración de neutrófilos que conducen a una respuesta antiinflamatoria y, por lo tanto, disminuyen la producción de moco.
Bebe mucho líquido, como agua, jugos diluidos, tés descafeinados, sopas y agua de limón. Van a hidratarte y aflojar la congestión.
Haz gárgaras con agua salada tibia, ya que esto puede ayudar a romper la flema en la parte posterior de la garganta y aliviar el dolor de garganta.
Evita el exceso de lácteos. Cuando se lucha contra la flema debido a una enfermedad, un alto consumo de lácteos puede conducir a una mayor producción de mucosidad y espesamiento de la mucosidad.
Usa un humidificador, ya que el vapor puede ayudar a agregar humedad al aire y eliminar la flema y la congestión.