EL CIUDADANO

“…No soy lo que me ha pasado. Soy lo que decido ser…” Carl Gustav Jung

Hola estimado lector, feliz miércoles 18 de octubre del 2023. Quiero exponerles el caso que nos presenta en su libro DIAMANTES EN BRUTO, nuestra autora DOLORES MOSQUERA, que nos representa el Trastorno Límite de la Personalidad y que llamaremos “SI TUVIERA UNA MASCOTA TODO IRIA MEJOR”, pues bien, el paciente .con TLP y fobia a los animales. En una sesión de grupo otros participantes hablan de sus respectivas mascotas y el cariño que les dan. A los pocos días empieza a pensar que si tuviese un perrito a quien dar su cariño y cuidar todo iría bien. Afirma que así saldría a pasear, que no lo hace porque tiene que hacerlo sola. La familia no está de acuerdo con la adopción de una mascota para ella, pero ella se empeña en que SIN LA MASCOTA NO PODRÁ MEJORAR. Finalmente aceptan. Le regalan un perrito y los primeros días está entusiasmada, su atención gira en torno a la mascota y a sus necesidades (darle comida, cariño, paseos y demás). Semanas más tarde le empieza a tener miedo, se siente culpable porque dice que le ha contagiado su depresión. Afirma que por su culpa no come ni duerme y que SI NO TUVIESE EL PERRO SE ENCONTRARÍA MEJOR. Devuelve la mascota a su dueño y semanas más tardé la empieza a echar de menos. Dice que ha sido un error y que si tuviese al perrito se encontraría mejor.

En este caso el pensamiento mágico es claro: necesito un perrito para poder pasear y sentirme mejor. Al mismo tiempo, la mascota le servía como un desvío de atención de su verdadero problema (el TLP). AHORA SU ÚNICO PROBLEMA ES NO TENER PERRO Y POSTERIORMENTE EL ÚNICO PROBLEMA ES TENER PERRO. LA SOLUCIÓN ES IGUAL DE MÁGICA: TENERLO O NO TENERLO. A ESTO SE REFIERE LA AUTORA CUANDO DICE QUE ES ALGO ASÍ COMO “SOLO TENGO QUE TENER ESTO PARA QUE TODO VAYA BIEN”.

Además de lo anterior podemos hablar de un afecto variable, una «estable inestabilidad», conductas impulsivas, conductas autodestructivas y trastornos cognitivos o de percepción en determinados momentos de alta emotividad. Esto les puede llevar a sentir o pensar en formas parecidas a las siguientes: 1. Sentimientos de no ser querido o de ser defectuoso: «Nadie me querría si me conociera de verdad», «Nadie podría querer a alguien como yo», «Si me conocen de verdad se darán cuenta de lo terrible que soy». 2. Sensación de inutilidad o de «no ser apto paran: «No sé hacer nada bien», «Soy un completo desastre». 3. Sensación de dependencia: «No puedo valerme por mí mismo, necesito a alguien en quien apoyarme», «Si no me acompañas, seguro que me sale mal». 4. Sensación de ser ignorado, abandonado u olvidado: «Estaré solo, nadie estará ahí para mí», «Si dejo de hacerme cortes, tengo miedo de que se olviden de mí», «Quién podría acordarse de llamar a alguien como yo’: 5. Sensación de pérdida de control: «No me puedo controlar», «Me dejé llevar, es algo que escapa a mi control’: «Si me equivoco la habré fastidiado por completo». 6. Falta de confianza en uno mismo y/o en sus propias decisiones: «Si no hago lo que quieren los demás, me abandonarán o atacarán», «Si le digo lo que pienso de verdad, pensará que soy un estúpido” 7. Desconfianza o suspicacia con relación a otras personas: ‘las personas me harán daño, atacarán o se aprovecharán de mí», «Seguro que me trata bien porque quiere algo de mí», » Me debo proteger de los demás». 8. Terror a ser arrastrados, engañados o traicionados por sus emociones: «Debo controlar mis emociones o algo terrible ocurrirá», «No le puedo demostrar lo mucho que me he alegrado de verle o no volverá», «Si sabe lo que siento de verdad pensará que estoy loco». 9. Autocastigo o auto sabotaje: «Soy una mala persona, merezco ser castigado’; «Si soy así de infeliz es porque me lo merezco», ‘Sólo encuentro una explicación a este malestar: yo me lo provoco, por lo tanto, merezco sufrir». Continuaremos con este interesante tema. Hasta la Próxima. EL CIUDADANO