General Cienfuegos rompe el silencio sobre su detención
|- El extitular de la Sedena, general Salvador Cienfuegos Zepeda, rompió el silencio y habló por primera ocasión sobre su detención en Estados Unidos, cuando se le pretendieron fincar cargos por narcotráfico.
El extitular de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), general Salvador Cienfuegos Zepeda, rompió el silencio y habló por primera ocasión sobre su detención en Los Ángeles, California, Estados Unidos, cuando se le pretendieron fincar cargos por narcotráfico.
En entrevista con el periodista Jorge Fernández Menéndez, el general calificó como una vileza su captura y afirmó que fue una afrenta a las Fuerzas Armadas, el principal socio de ese país, en materia de combate al narcotráfico.
Fue algo inmerecido, una injusticia, una vileza lo que hicieron conmigo, afectaron a mi familia y no nada más a mí, se fueron a pegarle a las Fuerzas Armadas, el principal socio que tiene Estados Unidos para combatir las drogas son las Fuerzas Armadas de México”, expresó.
El general Cienfuegos Zepeda ofreció detalles sobre la captura realizada por agentes de la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA, por sus siglas en inglés), durante su detención en el aeropuerto internacional de Los Ángeles, el 15 de octubre de 2020, cuando llegaba con su esposa, sus hijas y sus nietas a vacacionar.
En esa oficina me empezaron a tomar huellas, entonces dije: ‘de qué se trata, cuál es el problema de mi visa’, y no me contestaban nada; entonces dije: ‘a ver alguien que me haga caso, porque no voy a permitir que se me siga haciendo esto’.
Entonces ya llegó otra persona y me pidió que lo acompañara a otra oficina, pequeña, donde había cuatro hombres, que después supe eran agentes de la DEA… uno de ellos me explicó, porque así se lo explicó uno de ellos, un anglosajón, que había una orden de detención en mi contra expedida por un juez, en Nueva York, en la que se me acusaba de tres delitos, de introducción y producción de droga, y uno de lavado de dinero”, narró el general Cienfuegos.
Tras su captura, el militar en situación de retiro, fue trasladado a un centro de detención, esposado, una situación que, reconoció, nunca se había imaginado.
Ahí empieza, lo que yo diría que es el calvario, no, porque para empezar me esposan. Nunca en mi vida había estado yo en un problema, ni en México, ni en ninguna parte del mundo, ni siquiera de cerca, entonces me esposan como un criminal”, dijo el general Cienfuegos a Fernández Menéndez.
Posteriormente, en su traslado a una primera prisión federal, en donde la mayoría de los internos eran personas con problemas mentales; el extitular de la Sedena denunció que recibió tratos indignos, como ser desnudado por completo para una revisión.
En los 33 días que estuve ahí, estuve pensando muchas cosas, y una de esas fue, desde que me esposaron, es una forma de doblegar, de romper con la fortaleza, con el ánimo, en este caso mía, porque yo me mantuve serio digno protestando”, indicó el general Cienfuegos.
El exmando militar reconoció el trabajo realizado por las autoridades diplomáticas de México que intervinieron para aclarar su situación, desde el Gobierno de México hasta los consulados en Los Ángeles y Nueva York.
Rechazó las versiones de que, en algún momento, incluso había intentado cooperar con las autoridades estadunidenses, a cambio de ganar algún tipo de indulgencia.
Incluso, ellos corrieron el rumor, porque salió en Estados Unidos, de que yo había pactado cooperar con ellos, y que inclusive iba a dar nombres y no sé qué tantas tonterías”, dijo.
Finalmente, el general Cienfuegos Zepeda agradeció al presidente Andrés Manuel López Obrador, luego de su traslado de regreso a México, en donde fue recibido por su sucesor, el general Luis Cresencio Sandoval, en el Campo Militar número 1.
Si me lo permite, Jorge, de manera muy reconocida agradecerle al presidente de la República, su oportuna y valiente intervención”, afirmó.