¿Qué es la enfermedad celíaca, síntomas y por qué se relaciona con comer pan?

  • Esta enfermedad afecta a muchas personas e todo el mundo y limita su consumo de algunos alimentos.

La enfermedad celíaca es una condición que, a menudo, se malinterpreta como un problema exclusivo del estómago. Sin embargo, esta afección trasciende la mera digestión y afecta al organismo de manera más integral.

La confusión radica en que, al ser una enfermedad relacionada con la respuesta del sistema inmunológico al gluten o comer pan, los síntomas primarios ocurren en el tracto gastrointestinal.

Este trastorno puede afectar a personas de todas las edades y suele requerir un ajuste significativo en la dieta y el estilo de vida de quienes la padecen.

¿Qué es la enfermedad celíaca?
La enfermedad celíaca es un trastorno autoinmune que afecta principalmente el intestino delgado. Se desencadena al consumir gluten, una proteína presente en el trigo, la cebada y el centeno, ingredientes que están presentes principalmente en el pan.

Las personas con predisposición genética son las más susceptibles a desarrollar esta afección, aunque puede manifestarse en cualquier etapa de la vida, desde la infancia hasta la adultez.

El consumo de gluten por parte de un celíaco provoca una reacción inmune que daña las vellosidades del intestino delgado, comprometiendo la absorción de nutrientes esenciales y causando una variedad de síntomas y complicaciones a largo plazo.

¿Cuáles son los síntomas de la enfermedad celíaca?
Identificar la enfermedad celíaca puede ser desafiante debido a la diversidad de síntomas que puede presentar. Estos incluyen, pero no se limitan a:

Diarrea crónica o estreñimiento
Dolor abdominal y distensión
Fatiga persistente
Erupciones cutáneas, conocidas como dermatitis herpetiforme
Dolor en las articulaciones y huesos
Anemia debido a la deficiencia de hierro
¿Existe un tratamiento para la enfermedad celíaca?
Actualmente, la única terapia efectiva para la enfermedad celíaca es una dieta estrictamente libre de gluten. Esto implica eliminar todos los productos que contengan trigo, cebada y centeno.

Seguir esta dieta no solo mejora los síntomas, sino que también previene las complicaciones asociadas a la enfermedad.

Además, se recomienda a los pacientes que lean detenidamente las etiquetas de los alimentos para evitar el consumo inadvertido de gluten y que consulten con un nutricionista especializado para asegurar una dieta equilibrada y nutritiva.

Para aquellos con síntomas persistentes, puede ser necesario investigar otras condiciones asociadas o la posibilidad de seguir una dieta baja en FODMAP.

La dieta FODMAP implica la restricción de ciertos carbohidratos que son fermentables y de difícil digestión, los cuales pueden intensificar los síntomas en algunas personas con sensibilidad intestinal.

Esta dieta se enfoca en reducir la ingesta de alimentos que contienen estos carbohidratos, ayudando a aliviar la distensión, el dolor y otros síntomas digestivos en algunos casos.