Documental “2016: El Año de la Crisis”, un distractor
|- De manera sesgada, convocó a expertos en economía, políticos y ciudadanos afectados, que narran de primera mano el impacto que esta crisis tuvo para ellos.
- Financiado por el Gobierno Cuitláhuista, Gustavo Vega llevó a las pantallas un documental que describe lo que para él es el caos económico y político de Veracruz en los últimos años.
#Xalapa
Como medida de distracción y ante el reclamo permanente de los integrantes de la Asociación de Jubilados y Pensionados del ISSSTE en Veracruz (AJUPIV), quienes hicieron un urgente llamado para reconsiderar la decisión de ratificar en el cargo como titular de la Secretaría de Finanzas y Planeación a José Luis Lima Franco a quien llamaron “mentiroso”, pues les había prometido el pago de seguros y no se realizó aún y cuando tenía miles de millones en arcas para solventarlo; se patrocinó “2016: El año de la crisis”, documental producido por Cineteca Veracruz, que tiene una duración de poco más de hora y media, y que ya está disponible en distintas salas de cine veracruzanas.
Financiado por el Gobierno Cuitláhuista, Gustavo Vega llevó a las pantallas un documental que describe lo que para él es el caos económico y político de Veracruz en los últimos años: en el largometraje “2016: El año de la crisis”, el cineasta aborda las consecuencias más cercanas del manejo financiero durante la administración de Javier Duarte de Ochoa.
De manera sesgada, convocó a expertos en economía, políticos y ciudadanos afectados, que narran de primera mano el impacto que esta crisis tuvo para ellos.
Al respecto, el Exgobernador Javier Duarte de Ochoa, directamente señalado y al que no se le dio el derecho de externar su punto de vista; manifestó su opinión al documental producido por Cineteca Veracruz:
“Son realmente pocos los sistemas de pensiones en el mundo que operan con números positivos ya que la pirámide de trabajadores está invertida, esto es, hoy en día existen más trabajadores jubilados que trabajadores en activo, por lo que sus aportaciones y las aportaciones de sus patrones no son suficientes para mantener las pensiones.
Si a esto le sumamos la práctica que existe en Veracruz en donde a los trabajadores en activo antes de jubilarse les dan una plaza de mayor ingreso para que se jubilen con ese último sueldo -existen en la actualidad trabajadores jubilados que ganan más que el Presidente de la República-; y a que antes de la reforma que impulsé a la Ley de Pensiones del Estado existían trabajadores que se jubilaban a los 50 años de edad, es imposible que un sistema de pensiones como el veracruzano se pueda mantener sin ser subsidiado por el gobierno, durante los 5 años, 10 meses y 12 días que duró mi administración no hubo una sola vez en que el IPE no pagara las pensiones de los trabajadores jubilados, reconozco que en ocasiones por cuestiones de flujo hubo retrasos que despertaron justificada irritación entre los pensionados, sin embargo, siempre se cumplió con esta vital responsabilidad.
Respeto a quien difiera de lo anterior, no obstante quien diga lo contrario está mintiendo, tan es así que uno de mis principales críticos quien fue director del IPE durante el gobierno Yunista no pudo hacer nada.
Entiendo que ahora los corifeos de los Yunes traten desesperadamente de generar un distractor para desviar la atención de los temas penales que traen en su contra Yunes Linares y sus vástagos.
Estoy absolutamente convencido que los trabajadores pensionados veracruzanos son personas inteligentes que no se dejarán tomar el pelo con esta aburrida jalada que tiene un fondo más político y protagónico que económico o social”.