Acervo artístico UV llega al Museo Universitario de Arte Contemporáneo

  • Como parte de la exposición Geometría Sensible, con 48 piezas de Myra Landau, académica que formó parte del Instituto de Artes Plásticas.

La obra de Myra Landau, quien fue investigadora de la UV, forma parte de la exposición Geometría Sensible en el MUAC.

Prensa UV

Xalapa

Un total de 48 obras de la artista Myra Landau y que forman parte del acervo artístico de la Universidad Veracruzana (UV), fueron prestadas a la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) para integrarse a la exposición Geometría Sensible que se exhibe en el Museo Universitario de Arte Contemporáneo (MUAC).

La muestra, curada por Pilar García, se inauguró el 7 de septiembre y busca redescubrir a una artista que, a pesar de su impacto en la escuela geométrica mexicana, ha sido poco conocida. Para esta ocasión, su obra expuesta fue restaurada en su totalidad bajo la supervisión del personal del MUAC.

Myra Landau empleó un lenguaje abstracto geométrico, pero no ortogonal, con un enfoque más gestual y emocional, reflejando su experiencia migrante y su formación diversa. Su obra, que incluye elementos prehispánicos y oceánicos, es conocida por su experimentación con texturas y volúmenes; la crítica especializada considera que la creadora enriqueció el geometrismo mexicano.

Es la contención y distención de los espacios los que permiten la creación dinámica de su obra; es en ellos donde surgen ambientes que sugieren la tridimensión y el ritmo. Sus investigaciones sobre la técnica del pastel, el volumen y el movimiento de sus líneas, junto con la manera en que integraba el espacio en sus composiciones, despertaron un enfoque novedoso dentro de la plástica contemporánea.

Su estancia en México marcó un punto de inflexión en su desarrollo artístico, fue aquí donde encontró un ambiente propicio para la experimentación, conectando con artistas e intelectuales de la Generación de la Ruptura, lo que le ofreció la oportunidad de integrarse a un entorno artístico innovador.

En el Instituto de Artes Plásticas de la UV su producción como investigadora fue vasta, generosa y marcó un hito en los artistas xalapeños; uno de los aportes más significativos de Landau fue su capacidad para fusionar lo lírico con lo abstracto: aunque se movía en el ámbito de la abstracción, su obra no se centraba en lo puramente formal; esta fusión entre lo emocional y lo conceptual permitió que su trabajo tuviera un impacto profundo e individual en el público.

En la década de los años setenta, Landau empezó a explorar lo que llamaba “caligrafías rítmicas”, que implicaban el uso de grafismos abstractos, específicamente en grandes formatos. Estas obras destacaban por su fuerza gestual y su conexión con la naturaleza, el espacio y el tiempo.

Actividades como ésta certifican la importancia y compromiso que desde la UV se le otorgan al rescate y dignificación del patrimonio artístico tangible; a su vez, forma parte de los proyectos de vinculación del IAP y el MUAC, contando con el apoyo de la Dirección General del Área Académica de Artes y en concordancia con el Convenio Marco entre la máxima casa de estudios de Veracruz y la UNAM.