Los restos de la reina llegan a su última parada
|- El féretro de Isabel II fue trasladado al Palacio de Westminster, sede del Parlamento británico; la torre del Big Ben tocó 96 campanadas mientras miles de ingleses hicieron fila; un guardia colapsó
LONDRES.
El Palacio de Westminster fue escenario de una misa en homenaje a la reina Isabel II, cuyos restos ya reposan en la sede del Parlamento.
El rey Carlos III, la reina consorte, Camila, y otros miembros de la familia real asistieron a un breve servicio religioso, encabezado por el arzobispo de Canterbury, Justin Welby.
Además, la torre del Big Ben tocó 96 campanadas, en honor a la monarca.
La ceremonia religiosa concluyó con el himno Dios salve al Rey.
El ataúd, cubierto con el estandarte real y sobre el que reposa la corona imperial, permanecerá durante los próximos días sobre una plataforma, custodiado las 24 horas del día por militares que sirven a la Casa Real.
Se trata de la última parada en la que reposarán los restos de la monarca antes del entierro, el próximo lunes.
FILAS KILOMÉTRICAS
Emoción contenida y llanto marcaron las emociones de los asistentes al Palacio de Westminster.
Ayer, los ingleses iniciaron la despedida de Isabel II, en una capilla ardiente que permanecerá abierta en Londres hasta su funeral.
Algunos pasaron dos noches en la calle, pese al frío y la lluvia, como Anne Daley.
Renuncié a dos noches de comodidad por alguien que dio 70 años de compromiso infatigable al mundo, no es nada”, declaró la mujer de 65 años.
Tras la larga espera, pasaron apenas unos segundos frente al féretro de la mujer que fue la monarca más longeva de su país.
Desfilaron a ambos lados del alto catafalco púrpura, situado sobre un zócalo de cuatro peldaños y protegido por guardas en uniforme de gala, al que no podían acercarse.
Algunos hacían una reverencia, otros lanzaban un beso.
En el interior, todo era muy tranquilo y muy emotivo. Mucha gente lloraba, pero había un silencio total. Fue muy respetuoso”, dijo Sue.
Además, un guardia real perdió el conocimiento y se desmayó durante el funeral, captaron las cámaras de la Reina Isabel II.