¡CITA CON LA GLORIA!

Con Messi pletórico anotando y dando asistencias, con Julián Álvarez marcando doblete y con un país entregado, Argentina está en la Final del Mundial

EFE/Qatar

Disfrutando el futbol como nunca, mostrando la «sangre caliente» que por tantos años le exigieron y guiando a toda una nación rumbo al máximo sueño en el futbol, Lionel Messi comandó a Argentina para obtener el boleto a la Final de la Copa del Mundo con un gol y dos asistencias en la paliza de 3-0 a Croacia.

«Maradoneando» como lo dijo recientemente Jorge Valdano, la Pulga luce a ratos como el mismísimo Diego llevando a la Albiceleste en 1986 a la conquista del Mundial.

En el caso de Leo le falta un partido, pero la ilusión y lo que transmite en esta edición, a diferencia del 2014, tiene a millones de argentinos enloquecidos.

El Estadio Lusail fue el escenario donde la Selección de Argentina cobró una cara revancha a Croacia, equipo al que simplemente le pasó por encima para clasificar a su sexta final de Copa del Mundo, donde Lionel Messi y sus «muchachos» buscarán bordarle la tercera estrella al escudo de la Albiceleste. El 21 de junio del 2018 en Rusia, los croatas vencieron 3-0 a los argentinos en duelo de Fase de Grupos. Esa derrota casi los dejó eliminados del Mundial, y aunque lograron recuperarse y clasificar a Octavos de Final, ese descalabro quedó marcado por la manera en que el equipo balcánico bailó a los sudamericanos.

Hoy, Argentina, con un contundente Julián Álvarez y un Lionel Messi excelso, aguerrido y con hambre de un campeonato del mundo, le devolvió el golpe a Croacia con un contundente 3-0, que pudo ser 4-0 y hasta 5-0, de no ser por dos grandes intervenciones del portero Dominik Livakovic, quien pese a la fama que se hizo en el torneo de ataja penales, no pudo evitar que la Pulga abriera el marcador desde los 11 pasos.

 Al minuto 34, Messi hizo el 1-0 en el Estadio Lusail luego de una falta del propio Livakovic sobre la Araña Álvarez.

Con un golpe perfecto, Lio la mandó a guardar en el ángulo superior derecho, sin oportunidad para el arquero rival, que pese a que adivinó la trayectoria, fue imposible alcanzar el esférico.

Cinco minutos después, la zaga balcánica, en la que había basado su juego Zlatko Dalic, se desmoronó cuando Álvarez apareció una vez más dentro del área para poner el 2-0, en una jugada donde arrastró la pelota desde la media cancha. Con suerte le quedaron un par de rebotes, hasta que empujó el esférico sobre la salida de Livakovic. Croacia intentó apretar en el arranque de la segunda parte, sin embargo, la defensa Albiceleste no falló, como sí lo había hecho ante Australia y Países Bajos, provocando que ambos duelos terminaran en tono cardiaco.

Soportó los tímidos embates, porque nunca tuvieron un peligro real, y cuando el momento apremiaba, apareció Messi para crear una jugada a su estilo, con el esférico pegado al pie y quitándose de encima a sus rivales. Entró al área con la bola controlada, vio la llegada de Julián por el centro y se la dejó para que el atacante juvenil hiciera su segundo tanto de la noche y el 3-0.  Con ese marcador  terminó el juego.

 Argentina volvió a celebrar y se clasificó a su sexta final de Copa del Mundo, donde buscará terminar con la mala racha que lo ha llevado a perder las últimas dos ante la Selección de Alemania en 1990 y 2014. Ahora solo espera a Francia o a la sorprendente Marruecos.