¿Los padres tienen preferencias entre sus hijos?

  • Expertos afirman que es común que los padres tengan este tipo de comportamientos.

Para nadie es un secreto que en familias numerosas siempre existe un rumor sobre el favoritismo que existe de los padres hacia alguno de sus hijos. Por lo general, varios núcleos familiares se conforman por dos o tres hijos, quienes en muchos casos no se llevan mucha diferencia de edad.

Por supuesto, hay una pregunta que suele estar presente en la parte social pues involucra directamente a los padres y el modo en el que se relacionan con sus hijos.

Ante el cuestionamiento “¿Tiene algún hijo preferido?”, la mayoría de los adultos responde de forma diplomática “No, yo los quiero a todos por igual”, para no generar controversia entre los miembros de su familia.

Sin embargo, varios estudios científicos sobre este tema han concluido que es un hecho inevitable, ya que suele presentarse de diferentes formas y con distintos motivos que se relacionan directamente a los hijos. Todo se enfoca en las personalidades, el tipo de actitudes y la afinidad que existe con cada uno de ellos.

De acuerdo a una investigación revelada por Katherine Conger, maestra de Desarrollo Humano y Estudios Familiares de la Universidad de California, más del 70% de los padres han aceptado tener preferencia por uno de sus hijos.

Tras varios estudios y análisis que incluían a más de 400 pares de hermanos, Conger logró concluir que existe una tendencia muy marcada de los papás que preferían a los hijos mayores, sin importar el sexo. El trabajo fue publicado en la revista Journal of Family Psychology.

Según las declaraciones brindadas por Jeffrey Kluger, autor del libro ‘El efecto de los hermanos’, a la revista Semana, el hallazgo de Conger sobre esta tendencia se debe al orden de nacimiento de los hijos, pues todo depende de la dedicación y esfuerzo que le imprimen los padres al crecimiento del primogénito.

Por supuesto, es importante destacar que esta base se relaciona con la supervivencia de la especie, pues el primer hijo se convierte en el ejemplo de los demás y en el que asegura (por lo general) la descendencia mucho más rápido.

Por lo general aquellas familias que son integradas por más de dos hijos suelen presentar un caso especial, pues aquellos que se encuentran en el medio no cuentan con la suerte de ser preferidos o favoritos entre sus padres. Los menores por el contrario llegan al mismo nivel de los mayores, pues sus madres los ven como los más vulnerables y tiernos por ser los últimos en llegar.

En cuestión al género, cuando uno de los hijos es del sexo opuesto al de sus hermanos suele tener un trato especial de parte de sus padres, pues se convierte en un afecto distinto al que le han dado a los otros.

Algunos expertos en el tema afirman que más allá del sexo o del orden de nacimiento, los padres generan favoritismo entre sus hijos por el parecido físico, los comportamientos, los éxitos académicos o por la expectativa que depositan en ellos.

No obstante, ante estos actos, la psicóloga clínica Ellen Weber Libby asegura que en algunos casos el hecho de que existan favoritismos tan marcados entre padres e hijos puede afectar psicológicamente a los demás, pues se generarían rivalidades y endivias.

Por su parte, la psicóloga Amarilys Rodríguez confirmó que este tipo de preferencias suelen repercutir en el comportamiento y en las actitudes de los menores que se percatan del favoritismo de sus padres hacia alguno de sus hermanos.

“Lo que puede evidenciarse es que hermanos presentan problemas de comportamiento, porque están tratando de llamar la atención de sus padres. También pueden presentar una actitud negativa hacia los padres retando la autoridad. En términos generales, que se críen con baja autoestima y muchos celos”, expresó la especialista.