Tecolutla es escenario de otra masacre

  • En sólo 24 horas los veracruzanos siguen viendo el aumento de las muertes

TECOLUTLA, Ver.- Un macabro descubrimiento se llevó a cabo en la zona de playa de la localidad Casitas, en el pueblo de Tecolutla, donde tres cuerpos sin vida, dos hombres y una mujer, fueron encontrados con heridas de bala en la cabeza. La alerta llegó tras una llamada anónima al 911, que informó sobre la presencia de los cuerpos en “El Playón”, cerca de la calle Miguel Alemán.

Los cuerpos, dos hombres y una mujer, fueron encontrados en condiciones escalofriantes, abandonados detrás de negocios en la calle Miguel Alemán. La primera víctima masculina vestía un pantalón y una camiseta negra; la segunda, un conjunto deportivo azul. La mujer, identificada por una blusa roja con la leyenda “Ángela”, presentaba heridas de bala y signos de violencia que dejan entrever un posible mensaje detrás de este atroz crimen.

La rápida movilización de las fuerzas preventivas municipales y estatales puso de manifiesto la gravedad de la situación. Acordonaron el área y comenzaron a implementar los protocolos correspondientes, mientras la comunidad se sumía en un silencio inquietante, conscientes de que este tipo de sucesos se han vuelto casi rutinarios en la región.

La llegada de la Fiscalía Regional y agentes ministeriales marcó el inicio de una investigación que, a todas luces, debe ser exhaustiva. ¿Qué llevó a estos individuos a este trágico final? ¿Acaso hay un trasfondo de criminalidad organizado que opera impunemente en Tecolutla? Los residentes no solo claman justicia, sino también respuestas ante un sistema que parece desbordado.

Los cuerpos fueron trasladados al SEMEFO en Papantla, donde se realizarán las necropsias correspondientes. Sin embargo, el verdadero desafío radica en que las autoridades logren no solo identificar a las víctimas, sino también dar con los responsables de este macabro acto.

Tecolutla, un lugar que debería ser sinónimo de tranquilidad y disfrute, se ve ahora ensombrecido por el eco de la violencia. La comunidad observa con angustia y la pregunta persiste: ¿hasta cuándo seguirá la impunidad en este rincón del país? La sociedad exige no solo respuestas, sino un compromiso real por parte de las autoridades para erradicar este ciclo de horror.