Pablo Meira Cartea recibió el doctorado Honoris Causa por la UV
- Vivimos una emergencia climática; lo único que podemos hacer es reducir la posibilidad de peores escenarios futuros, reconoció.
- El investigador español recibió el máximo reconocimiento académico en el marco de la pasada Feria Internacional del Libro Universitario.

#Xalapa
Pablo Ángel Meira Cartea fue designado por las juntas académicas del Centro de Ciencias de la Tierra y el Instituto de Investigaciones en Educación de la Universidad Veracruzana (UV) para recibir el doctorado Honoris Causa por su trabajo en la creación y difusión de instrumentos educativos de libre acceso para los educadores.
Su postulación fue respaldada por la Facultad de Pedagogía y el Instituto de Investigaciones y Estudios Superiores Económicos y Sociales, por la creación y difusión de instrumentos educativos de acceso libre, relacionados con la educación ambiental y siendo aprobada en la sesión del Consejo Universitario General (CUG) del 31 de marzo de 2025.
Académico de la Facultad de Ciencias de la Educación y del Instituto de Investigación do Medio Acuático para unha Saúde Global (Iarcus), el investigador español recibió el máximo reconocimiento académico en el marco de la pasada Feria Internacional del Libro Universitario (FILU).
Meira Cartea compartió algunas de sus impresiones respecto al momento actual de la civilización, donde se enfrenta una condición ambiental crítica, a la que él considera como emergencia climática.
¿Qué representa recibir el doctorado Honoris Causa por su trayectoria orientando esfuerzos hacia la educación ambiental?
Bueno, para mí es un honor, primero porque es fruto de un trabajo ya de casi década y media, ¿no?, en que estamos colaborando con investigadores e investigadoras de la Universidad Veracruzana, del Instituto de Investigaciones en Educación, también de la Cosustenta, y para mí esto es, digamos, coronar con esta honra y con gente como el doctor Carlos Welsh, que hizo la propuesta del doctorado en esta causa, pues para mí es un honor inmenso poder estar aquí, compartir con la comunidad universitaria veracruzana lo poco que hacemos por responder educativamente a cuestiones como la emergencia climática.
Al recibir el doctorado, mencionó que estamos ya en un estado de emergencia climática…
Sí, nosotros ya no hablamos de cambio climático ni de crisis climática, utilizamos el concepto de emergencia porque el lenguaje es importante, ¿no?, y el lenguaje nos ayuda a cualificar y a caracterizar la naturaleza de la realidad, y la realidad ahora mismo es que estamos sobrepasando todos los límites que hicieron que el clima del planeta fuese estable en los últimos 12 mil o 13 mil años, y eso inevitablemente va a tener consecuencias para el ser humano y para toda la biósfera.
Refirió también que preguntarse en qué grado de la crisis climática nos encontramos es intrascendente…
Sí, el cambio climático es inevitable. Lo único que nos estamos jugando, y ahí tenemos cierto margen de maniobra, es con la posibilidad de minimizar o de reducir la posibilidad de que los peores escenarios -y esto porque la ciencia nos ilumina, nos muestra- se hagan realidad.
Porque esos escenarios además van a afectar especialmente a las comunidades, a los colectivos de población con menos recursos, con más problemas para satisfacer sus necesidades básicas, y ahí es donde se va a concentrar el sufrimiento de un cambio climático sin ningún tipo de control o de mitigación por parte de la sociedad humana, que además tiene que ser una respuesta global, que es otro problema.
No será suficiente con que algunos grupos humanos, Estados, naciones o grupos de estados respondan adecuadamente, sino que tenemos que articular una respuesta a nivel global que estamos muy lejos de conseguir.

