“Neuróticos Anónimos”: apoyo gratuito

  • Impulsa la salud emocional juvenil en Orizaba

Alfonso Gutiérrez

#Orizaba

En Orizaba, un grupo de fortalecimiento emocional está marcando la diferencia para adolescentes y jóvenes que viven bajo la sombra de conflictos familiares y síntomas emocionales persistentes. Se trata de Neuróticos Anónimos, organización que ofrece un espacio de acompañamiento gratuito para quienes atraviesan crisis internas provocadas por dinámicas familiares difíciles.

Un refugio para las emociones

La iniciativa denominada Neur-A-Teen opera de forma permanente, sin costo alguno, todos los días del año, con el propósito de acercar ayuda en momentos de vulnerabilidad. La propuesta consiste en encuentros grupales donde las personas pueden expresar sus vivencias, angustias y decepciones, compartiendo experiencias similares para hallar contención entre pares.

Aunque los jóvenes no son diagnosticados como “neuróticos”, el modelo reconoce que el ambiente familiar lleno de tensión puede provocarles secuelas emocionales profundas. En este contexto, la estrategia grupal se convierte en una vía sanadora.

Voxes desde el interior

“Cuando las discusiones no paran en casa, el cuerpo lo siente: falta de concentración, insomnio, desesperanza”, relata una participante. Otros jóvenes describen que estas sesiones les ofrecen un alivio al saber que no están solos, que alguien escucha sin juzgar.

Los encuentros obedecen a los principios del programa de Doce Pasos y Doce Tradiciones, una metodología que ha guiado a grupos de autoayuda a nivel internacional. Neuróticos Anónimos usa estos pilares para cimentar su labor de apoyo mutuo. 

¿Dónde acudir?

En Orizaba, un punto de atención funciona en la Buena Voluntad 24 horas de Neuróticos Anónimos, ubicado en la calle Poniente 7 No. 791 (entre Sur 12 y Sur 13).  Quienes deseen informarse también pueden acudir vía redes de la agrupación, pues mantienen difusión activa de sus servicios dirigidos a jóvenes. 

Trayectoria y fundamentos

Neuróticos Anónimos — fundada en 1964 en Washington D. C. — se define como un movimiento sin fines de lucro que aborda trastornos emocionales desde la solidaridad y el acompañamiento entre quienes han vivido experiencias similares.  En México, ha extendido sus actividades con adaptaciones culturales al contexto local.

Su filosofía sostiene que los padecimientos como ansiedad, culpa, ira y sensación de vacío pueden mitigarse cuando el individuo encuentra un espacio de escucha activa y procesos compartidos.

Retos presentes

Para organizar sesiones grupales, la agrupación enfrenta obstáculos comunes: difusión limitada, falta de recursos materiales y la barrera del estigma hacia quienes solicitan salud mental. Sin embargo, su vigencia —con presencia todos los días— demuestra un compromiso sostenido para atender a los jóvenes.

La pandemia de COVID-19 obligó a muchos grupos basados en el enfoque de doce pasos a reinventarse, adaptando modalidades virtuales de reunión para continuar la labor.  Neuróticos Anónimos no fue la excepción, readecando su esquema cuando fue necesario, sin abandonar su misión de ofrecer apoyo.

Una oportunidad para sanar juntos

Este tipo de iniciativas enfatiza que el cuidado de la salud mental no puede depender únicamente de diagnósticos clínicos, sino también de redes sociales y espacios comunitarios que escuchen, acompañen y empoderen. En una vida donde las heridas emocionales pueden permanecer ocultas durante años, la labor de Neuróticos Anónimos refleja que sanar es algo que no tiene que afrontarse en soledad.

Para quienes gustan de explorar más sobre el programa, consultar grupos o asistir a reuniones, la agrupación publica su directorio local en su sitio web oficial.