EL ‘DOCTOR’ DE LA SSP

AL PIE DE LA LETRA

Raymundo Jiménez

EL ‘DOCTOR’ DE LA SSP

Como ha venido sucediendo en la entidad con los últimos gobiernos, después del 30 de noviembre de 2024 todos los errores y abusos de poder no serán imputados por los veracruzanos a los funcionarios directos responsables sino al titular del Poder Ejecutivo.

Y es que en la memoria colectiva el único nombre que suele mantenerse vivo es el gobernador en turno. Con el paso de los años casi nadie suele recordar quién fue director o secretario de Seguridad Pública, de Gobierno, de Salud, Tesorero o Procurador de Justicia, pero sí saben quién era el jefe de todos ellos. Lo mismo ocurre en el nivel federal, por lo que los últimos cinco exPresidentes de la República están por ser sometidos a la consulta popular de agosto próximo, no sus excolaboradores.

Por eso sería de esperarse que el gobernador Cuitláhuac García, quien está por llegar a la mitad de su sexenio, realizara con frialdad y sensatez un balance de su administración para determinar qué otros ajustes debería hacer en su gabinete.

El 21 de junio pasado le pidió la renuncia a Eduardo Cadena, secretario de Desarrollo Agropecuario, ya la semana siguiente, el lunes 28, hizo lo mismo con la secretaria del Medio Ambiente, Rocío Pérez.

Sin embargo, una área gubernamental que más críticas le sigue generando a su administración es la de Seguridad Pública, en la que le impusieron desde el gobierno central al neoleonés Hugo Gutiérrez Maldonado, a quien el Congreso local le tuvo que conceder la dispensa de ley para asumir la titularidad de la SSP por no ser nativo del estado ni hijo de padres veracruzanos.

Su nombramiento se atribuye a su supuesto parentesco con Beatriz Gutiérrez Müller, esposa del presidente López Obrador, lo que al parecer le valió que no tomaran muy en cuenta sus antecedentes polémicos como exjefe policiaco en Coahuila y Nuevo León.

Tampoco le hizo mella el escándalo mediático acerca de su “doctorado de un año” sobre el “Nuevo Sistema Penal Acusatorio” que aseguraba haber cursado en el Centro de Estudios Superiores en Ciencias Jurídicas y Criminología (Cescijuc), de Monterrey, y que reporteros de la revista Proceso descubrieron que no existía.

Este viernes, en Amatlán, las políticas estatales fueron señalados de acribillar a dos adolescentes; en Omealca, también en el centro del estado, fueron reprimidos pobladores que se quejaban de detenciones ilegales; en Oluta, al sur de Veracruz, fueron golpeados manifestantes que protestaban por abusos y saqueos de los supuestos guardianes del orden, y este sábado, en Nuevo Teapa, municipio de Moloacán, reporteros fueron agredidos y cinco de ellos detenidos cuando cubrían periodísticamente el bloqueo de la autopista Coatzacoalcos-Villahermosa por habitantes que exigían la liberación de un vecino de la comunidad Las Palomas que el día anterior había sido aprehendido ilegalmente por la Fuerza Civil y cuyo paradero desconocían.

¿Cómo querrá el gobernador Cuitláhuac García que lo recuerden los veracruzanos? Porque seguramente el titular de la SSP se desaparecerá del estado a más tardar en 2024.