Cuando el pueblo reclama, sólo queda obedecer
|Cuando el pueblo reclama, sólo queda obedecer
Reynaldo Escobar
Hoy se cumple un aniversario más del triunfo de la revolución cubana y de la caída del gobierno del dictador Fulgencio Batista, lo que hizo posible el ascenso al poder, del líder del ejército rebelde Fidel Castro Ruz, quien por más de 70 años fue un destacado activista político, de los cuales por cerca de medio siglo ejerció el poder político en Cuba, hasta su muerte ocurrida el 25 de noviembre de 2016.
Su relevo Raúl Castro Ruz, mantuvo el mando instaurado por su hermano Fidel, quien entre muchas frases convertidas en célebres, expresó alguna vez: “si salgo, llego; si llego, entro; sí entro, triunfo”; y efectivamente entro y triunfó para mantenerse en el cargo y gobernar a la isla de Cuba. El rumbo político marcado para Cuba, por el comandante Fidel, tenía el propósito de transformar la dependencia de los Estados Unidos, establecida en la doctrina Monroe, hasta lograr un impacto mayor que ninguna otra insurrección latinoamericana haya logrado.
Castro expresó entonces, otra frase que se hizo célebre argumentando: “la historia me absolverá”, y tuvo razón porque el pueblo cubano en su mayoría, aún después de su muerte mantuvo la dignidad y logró el respeto en foros internacionales, del país más rico y poderoso del mundo, los Estados Unidos de Norteamérica.
Nadie esperaba las manifestaciones y protestas que apenas se dieron en más de 20 ciudades de Cuba, menos el presidente Miguel Díaz Canel, quien mostró capacidad y carácter para gobernar y controlar la situación; sin ejercer la represión, que podría haber generado una insurrección mayor, por el hartazgo de las nuevas generaciones que a través de las redes sociales, están al tanto de las ventajas que representa vivir en libertad y aspirar a una mejor calidad de vida.
La dependencia de Cuba con los Estados Unidos de Norteamérica, no se puede negar, y el modelo de “Socialismo de Mercado”, que se consideró viable para los cubanos, durante el gobierno de Obama, nunca se dió. Con Donald Trump, resultó imposible por el endurecimiento de su relación política contra el pueblo cubano, que espera que Joe Biden, le dé un mejor trato a Cuba y no siga el mal ejemplo de su antecesor.
No hay que olvidar que el pueblo “siempre tiene la razón” y por consiguiente el Presidente cubano, debe atender los reclamos de su pueblo, oprimido y sin oportunidades de desarrollo y superación personal, antes de que un estallido social, lo rebase y se haga justicia por propia mano.