PANDORA PAPERS COMO PAPELES DE PANAMÁ, SÓLO CALIENTAN A LOS POBRES

60 SEGUNDOS

RAUL GONZALEZ RIVERA

PANDORA PAPERS COMO PAPELES DE PANAMÁ, SÓLO CALIENTAN A LOS POBRES

                Un modo  o manera para distraer la atención de los grandes problemas sociales que agobian a los países latinoamericanos, primero  fue el explosivo anuncio e investigación que realizaron más de cien periodistas a cuyo descubrimiento calificaron como Papeles de Panamá, ahora se vuelve a  inquietar sobre todo a los pobres y las clases medias populares porque otros Pandora Papers sale a la luz pública, pero no pasará del escándalo periodístico, ya que esos negocios están a salvo de los tentáculos de la justicia.

                En la gran provincia de los países involucrados, el tema realmente les atrae o importa un comino.

                Los especialistas, en materia de derecho, aseguran que no hay lavado de dinero y si acaso, conforme a los países anfitriones de los trillonarios recursos monetarios, que se guardan o invierten en los paraísos fiscales, pudiera darse el fenómeno del ocultamiento de recursos, que no pagaron impuestos correspondientes. La mayoría de los personajes que guardan sus tesoros monetarios en estos destinos fiscales, lo hacen por privacidad, pasar desapercibidos y sin dejar lugar a dudas, a diferencia del resto de sus connacionales, muchos tratan de esa manera a encubrir delitos catalogados como criminales.

                Más aún, la noticia deja de causar mayores impactos, porque se trata de empresarios millonarios, políticos en retiro y funcionarios públicos vigentes en diversos gobiernos, así como artistas como se ha dicho, entre los famosos como Julio Iglesias, Shakira y otros.

                De acuerdo con la investigación llevada a cabo por más de cien países del orbe, en el caso mexicano, la cifra de inversores que no pusieron a trabajar sus fortunas personales en su país, alcanza los tres mil, coincidiéndose en que son muchos, a los cuales las fauces de la ley y la justicia, se considera que lleguen a alcanzarlos.

                El cisma que causa esta doble investigación, se debe a que nadie duda, que en el caso de los personajes ligados a la política en sus distintos países latinoamericanos, verbigracia Perú, Venezuela, Colombia y porque no también México, algo tiene que ver con la corrupción, pues los socios de Pandora Papers, son políticos, ex funcionarios públicos, artistas, cantantes, porque “Chompira” pueblo, queda nomás como el chinito “milando”.

                Si tres mil mexicanos poderosos, mantienen sus activos y bienes bajo reserva en los destinos fiscales más seguros del mundo, sabiendo que México, es un país, donde la pobreza extrema alcanza a 56 millones y otros 40 millones sobreviven sobre el doble filo de la navaja, al no saber qué viene mañana, bien podría catalogarlos el verbo popular  como traidores a la patria, al no invertir esos fondos en territorio azteca, porque las fuentes de trabajo, no se abren y hay 4 millones de analfabetas y otros doce millones sin un lugar donde ocuparse laboralmente.

                En el caso mexicano,  los multimillonarios, pueden  hacer lo que les venga en gana, sabedores de que para ellos la justicia les asiste, y por otro lado, el grueso de la población azteca, permanece  ajena a este  escándalo, sobre el cual, ni se informa, ni pretende hacerlo, permitiendo hacer los que pueden enviar remesas millonarias a los destinos seguros, a salvo de las pesquisas hacendarias y  en cuyos países de destino, hasta pareciera estarles abriendo las puertas, porque sus arcas y modos de hacer negocios, les permiten hacerse de ganancias también trillonarias.

                Papeles de Panamá y Pandora Papers, cumplen ya en su práctica 30 años cuando menos de estarse aplicando en paraísos fiscales. Las investigaciones periodísticas, arrancan en el año de 1990 y culminaron apenas el pasado año de 2020. Esperemos a ver qué sigue.

SEUDOLÍDERES DE COLONOS, SURGIERON HACE 50 AÑOS Y NADIE LOS HA DETENIDO

El repaso que hacen estudiosos de la ciencia social, aseguran que la invasión de colonos en los predios que después se apoyaron para asegurar que eran suyos, gracias a supuestos líderes que vinieron de otras partes de la república y las autoridades edilicias jamás pudieron contener, menos coadyuvaron forzarlos a regularizar el uso de la tierra como destino habitacional.

Es cierto como lo dijo el alcalde Hipólito Rodríguez Herrero que el cobro a colonos de cuotas por parte de sus dirigentes, se remonta a 20 o 30 años, cuando en realidad este fenómeno arrancó cuando estaba el régimen priista todopoderoso de Carlos Salinas, por ordenar que el bosque de las Animas, se fraccionara y se vendieran lotes para ordenar la vivienda, fenómeno que en Xalapa nunca se ha dado.

El ingeniero Rafael Téllez Muñoz, diría alguna vez que el único fraccionamiento habitacional regulado y recibido por el ayuntamiento con todas las que le ley marca en la materia, es el Veracruz, cuyos trazos, pasillos, zonas jardinadas y una pequeña reserva territorial, se siguen conservando y respetando desde su creación.

                El prurito de la corrupción, se agiganta cuando Xalapa con solo 40 colonias antes de los años 80 del pasado siglo XX, en la hora actual cuenta con más de 400 y muchas de ellas, apenas han sido pobladas con dos o tres centenares de habitantes.

 En este negocio de apertura tiene que ver la autorización que hace desarrollo urbano municipal a los llamados líderes de colonos, todos improvisados, que vinieron para quedarse desde otras latitudes como Puebla, Tlaxcala y el estado de México, a los cuales quedan sometidos los colonos, que se ven en la necesidad de pagar cuotas, a cambio de recibir con el paso del tiempo, un lote, en donde de manera irregular, va a levantar su vivienda.

El alcalde local, puede hacer el llamado  a manera de prevenir a colonos, para que no se dejen chantajear por sus líderes, pero entonces, el papel de la autoridad en este contexto-se preguntan los menos aviesos en estos temas- cuál es, porque en los despachos de la dependencia de rigor en el ayuntamiento, para sus burócratas, lo importante es que ingresen los pesos y centavos por el predial, el agua, la basura y el mantenimiento del alumbrado público, que en gran parte de la ciudad, todos estos servicios son deficientes, se dan a cuentagotas y cada que dios se descuida. Esto señalan colonos de todos los rumbos de la otrora Atenas veracruzana.

Todavía en los años 70, Xalapa era una ciudad ricamente aireada, con una reserva territorial abundante en fauna y flora y áreas de un bellísimo verde que rodeaba a una ciudad, de poco menos de 50 mil habitantes.

Colonos auténticos, recuerdan como Patrimonio del estado, a cargo del poderoso director entonces, don Porfirio Serrano Amador, arrasó con el apoyo de autorizaciones la ciudad y los falsos redentores de las luchas sociales, contaron con el padrinazgo y protección de los ediles de la época y los sucesores de aquellos, hasta convertir a Xalapa, en rehén no solamente de los taxistas y las barricadas, protestas en la calle y luchas estériles precisamente que encabezaron aquellos, en pro de la vivienda barata.

No es nada nuevo que los colonos paguen cuotas y mantengan costosas formas de habitar estas tierras, a los cuales los ediles precisamente nunca han podido erradicar del Xalapa, que alguna vez respiró aires limpios, paz social y enriqueciera culturalmente a los cuatro costados de la misma. Por favor.

EL RÍO SEDEÑO, SE QUEDA SIN AGUA POR DEVASTACIÓN DE LOS BOSQUES

Visitantes de otras latitudes del país y el extranjero, rememoran cuando la zona boscosa entre Xalapa y el Cofre de Perote, en mucho se asemejaba a las ciudades de Inglaterra, por su frio invernal, la neblina blanca hasta el suelo, como depositada en bellos montones de algodones, lo que atrajo a muchos y se radicaron definitivamente en la otrora ciudad de las flores.

Viejos xalapeños, que vivieron antes de los años 60-70 del pasado siglo XX, comentan que era una delicia venir a la capital del estado, sentir el frio sin calar los huesos, porque nos acercaba a disfrutar de un aire limpio, transparente, no obstante que las corrientes de viento que ahora se experimentan, en aquellos años, para nada.

Y así como el frio, el chipi-chipi y la neblina eran una constante que se repetía un día y al siguiente también, la gente de Xalapa, mostraba su calidez para con sus demás semejantes y atención, hacia los visitantes de paso o de quienes quedaban a atender asuntos de negocios y familia, o buscaban algún espacio para radicarse aquí.

Una amplia región conectaba a Xalapa, partiendo de la ciudad, con rumbo a Banderilla, Acajete, la Joya, las Vigas de Ramírez y por supuesto el valle de Perote. Su zona arbolada, repleta de pinos, oyameles, araucarias, se levantaban a los costados de la antigua carretera que enlazaba precisamente todos los lugares antes mencionados.

Así que el agua del río Sedeño, que bajaba de la montaña lucía espléndida por ser constante y abundante. Cuantos jóvenes y niños del pasado, nadaron en dicho río y qué cantidad de visitantes, aparcaban sus automóviles a sus lados, para descender de aquellos y presenciar la belleza natural del río y todo su entorno, cargado de vegetación y patos silvestres, ardillas y otras especies animales.

Toda esta región, gozó de un verde sin par, en la historia de los pueblos, que se precian de contar con árboles, plantas y flores, como son los jardines de la ciudad de Cuernavaca, estado de Morelos. Consecuentemente, a la belleza de su panorámica habría que sumarle su agua que nunca faltó en 200 años. Aquí los cultivos de todas las plantas y matas de árboles se dan, advertían los hombres y mujeres que conformaban el 3 por ciento del total de la población xalapeña, que gustaban de cultivar la tierra.

Por ende, respetuosamente para aquellos que refieren que Xalapa todavía sigue teniendo árboles y plantas y jardines, los del presente, en nada podrían compararse en atractivo natural, abundancia y colorido, así como el confort que prodigaban a las familias y los viajeros, aquellas especies y el entorno natural, de los primeros 50-60 y quizá 70 años iniciales del pasado siglo XX. Al tiempo.