Un desatino actuación de Intocable en Cumbre Tajín, grupo texano cerrará festividad

  • Originario de Texas, el grupo extranjero desentona en una celebración tradicional del pueblo Totonaca.
  • El Estado prefiere traer a un precio millonario a artistas extranjeros que no representan ni preservan las tradiciones del pueblo Totonaca.

Xalapa

Del viernes 18 al domingo 21 de marzo se realizará la edición vigésima tercera de la Cumbre Tajín; ello ante los riesgos de contagio del Covid-19, donde en los espacios públicos podrán participar hasta 50 mil personas cada día.

Este lunes 14 de marzo, la titular de la Secretaría de Turismo y Cultura, Xóchitl Arbesú Lago confirmó que esta edición si será presencial, luego de que en 2020 suspendieran algunas actividades por la llegada del coronavirus, y que, en el 2021 el festival se organizara de manera virtual.

Para el Gobierno, la intención de la Cumbre Tajín es reactivar la economía de Papantla, Poza Rica y municipios circunvecinos, y todas las actividades, incluso, los conciertos serán gratuitos con la idea de que la gente gaste su dinero en comida y en la compra de artesanías de la región; aún y cuando en ello, pudiera estar en riesgo la salud, ya que oficialmente la pandemia no ha terminado y está latente una quinta ola.

Confirmó que el Estado invertirá cerca de 30 millones de pesos en la promoción del evento, así como en la contratación de los grupos veracruzanos y de representatividad local y regional, que se presentarán en el nicho de la música, sin esperar recuperar ese dinero, pues lo que se quiere es “atraer turismo”.

Sin embargo, para el último concierto, se tiene la presentación de Intocable; Intocable es un grupo estadounidense de música texana/norteña de Zapata, Texas, Estados Unidos, fundado a principios de la década de los 90 por Ricky Muñoz y René Martínez y cuyos precios por presentación oscilan entre el millón y millón y medio de pesos, más gastos de alojamiento y traslado.

La presentación de Intocable, ha generado malestar entre las comunidades Papantecas, pues lejos de refrendar su identidad y orgullo, el Estado prefiere traer a un precio millonario, a artistas extranjeros que no representan las tradiciones del pueblo Totonaca.