Así nace la lucha olímpica en Xalapa

  • Los Juegos Olímpicos, surgen los gimnasios y la Ola Verde.

Xalapa

Escuchar hablar de Aníbal Pacheco López te remonta a los gloriosos Juegos Olímpicos de México ’68 y más aún, a la implantación de la lucha olímpica en Xalapa, así como otros deportes y la construcción de los gimnasios Omega, Allende y Universitario. Sin duda alguna, eran los tiempos de la orgullosa Ola Verde.

“Cuando estaban en boga los Juegos Olímpicos, fue como nació la lucha asociada en Xalapa, entonces nuestros gobernantes ante el desconocimiento de los deportes olímpicos, se dieron a la tarea de construir escenarios como el Gimnasio Omega, Allende, Gimnasio “C” y Universitario, en los años 1966 y 1967 contrataron excelentes entrenadores para preparar al seleccionado veracruzano, como Mario Tovar (con cuatro olimpiadas), hijo de Joaquín Capilla; él venía sábados y domingos a prepararnos, su esposa daba clases de gimnasia olímpica, entre otras disciplinas, por citar esgrima, clavados, halterofilia, atletismo, boxeo y wáter polo”.

Mientras que el primer entrenador de lucha colegial en Xalapa fue Alberto Rodríguez Cañada, maestro de la UV, él trajo este deporte porque lo aprendió en su etapa de estudiante en una universidad de Estados Unidos, así es como nace esta actividad en esta ciudad capital.

“Se conformó un excelente equipo y pese a las carencias, al final siempre ganábamos medallas y al otro día éramos noticia de ocho columnas en todos los medios deportivos, sin embargo, fuimos deportistas producto de las circunstancias, lo contrario a las grandes potencias que se instruían en masividad, ellos tenían de dónde escoger de las cerca de 30 disciplinas olímpicas”.     

“Nuestro barrio era El Dique, una ocasión mi hermano Karim que es mayor que yo por tres años, fue un gran competidor y representante de México a nivel internacional y poco se le recuerda en Xalapa, pasó por el Gimnasio Allende y el entrenador le pidió si quería enseñar este deporte, entonces lo que nosotros veíamos en la televisión era a El Santo y Blue Demon, pero éste era un deporte muy diferente a la lucha olímpica, así fue como nos iniciamos en este deporte”, abundó Aníbal Pacheco.     

Pacheco López recordó con orgullo: “En Xalapa, ahí en la colonia Tamborrel, tengo el honor de haber iniciado a Armando Fernández, quien participó en dos Juegos Olímpicos y por circunstancias siendo muy joven, llegó a la universidad, entonces lo instruí, pero llegó el momento que tenía que emigrar de la ciudad para poder avanzar a otros niveles y concentrarse en el COM”.

Otros grandes exponentes lo fueron los hermanos Narave, Héctor y Oscar, con carreras universitarias en biología y química, campeones nacionales; Porfirio Dorantes “El Chabelo”, campeón internacional.

En etapas anteriores, era un problema ir a competir en eventos nacionales e internacionales, pues nuestros gobernantes no tenían la cultura ni el conocimiento para brindarnos la atención como deportistas, parece un asunto de broma, ya que se nos daban un recurso mínimo para dos o tres elementos y no para el equipo, no alcanzaba para el hotel, teníamos que dormir en el gimnasio, llevábamos colchonetas, cobijas y almohadas…, algo que nunca se me va a olvidar, que para desayunar, comer y cenar, comprábamos pan, jamón y una naranjada llamada bonafina, la cual nos enfermaba del estómago y así teníamos que competir, al final siempre ganábamos medallas en todas las categorías, al otro día éramos noticia, incluso nos llevaban a saludar al gobernador, pero éste no sabía ni lo que pasaba”.

“Incluso para ir a competir en otros campeonatos, no me daban ni para los pasajes, tenía que costear mis propios gastos, entonces por eso ya ni les informábamos a la prensa de nuestros viajes a Estados Unidos, Cuba o Europa, estoy hablando de hace 40 años”, especificó el luchador olímpico.

Una más, cuando el representativo de Veracruz se ganó a pulso el mote de la famosa “Ola Verde” en unos Juegos Nacionales en el año de 1969, fueron dotados de tenis y uniformes verdes, les pusieron 9 autobuses ADO ahí en el Parque Juárez.

Ya entrado más a fondo en el tema, Aníbal Pacheco recordó: “En otro evento nacional celebrado en Hermosillo, Sonora, el gobierno nos puso un autobús de la Facultad de Ciencias Químicas de la UV, sin dormir, mal comidos, día y noche viajando con dos choferes a bordo, el camión se volcó, se encunetó en la carretera, afortunadamente no pasó a mayores, salvo algunos compañeros lastimados…, ahí llegaron los elementos del Politécnico a ayudarnos, con palancas y la fuerza humana, enderezaron el transporte para continuar la marcha; como delegado del representativo veracruzano viajaba el Profesor Raúl Casas, entrenador de judo, pero ojo nos pedían que no dijéramos nada al respecto”.

“Aquí lo menos que pudieron haber hecho nuestras autoridades era ponernos un avión, no que dormimos en literas prestadas por el Ejército Mexicano, quienes además nos dieron ellos mismos nos dieron de comer, hacía un calorón enorme, reitero siempre hemos carecido de educación en el deporte y de la ignorancia de quienes nos gobiernan”, así finalizó con esta charla Aníbal Pacheco.