COVID-19 LE ATINÓ AL DOS

LAVADEROS

Por EL TLACUILO

COVID-19 LE ATINÓ AL DOS

El coronavirus pegó en la oficina del número dos del Palacio de Enríquez.

El contagio de Eric Cisneros Burgos inició como un rumor hasta que fue confirmado en sus propias Redes Sociales: “Resulté positivo a COVID-19. Permanezco trabajando a distancia, coordinando desde mi aislamiento las labores de mi encargo y siguiendo las indicaciones de las y los extraordinarios médicos veracruzanos. Por estar atentos a mi evolución médica, gracias”. Fue el texto que revolvió el avispero… o la zopilotera; pues algunos interesados en su cargo empezaron a postularse para el relevo, mientras que otros más radicales lo daban por muerto y aseveraban que la noche del sábado la noticia de su deceso se haría oficial.

Ese día, un periódico porteño había publicado una nota acompañada de una supuesta fotografía de Cisneros hospitalizado, que resultó ser una jalada del Internet, es decir, tomada de una página médica.  

La grotesca fotografía pertenecía a un paciente anónimo con varios kilos más que el Secretario. ¿De dónde les saldría tanto odio a los agoreros de la desgracia?

“HOMICIDAS” VIRTUALES  

No fueron pocos los que dieron como un hecho el rumor de la muerte de Eric Patrocinio Cisneros. Quien escribe hizo lo que indica el librito: llamar por teléfono a algunas de las personas más cercanas al Secretario para corroborar la certeza o no de la “información”, que en este caso resultó ser “desinformación”.

Las versiones de su gente coincidían, lo describían estable y ocupándose (a través de un interlocutor) de asuntos propios de su encargo.

La desinformación que algunos habían propagado cargada de un odio personal, resultó más falsa que la promesa de que los precios de las gasolinas se mantendría a la baja; pero sí logró su objetivo de sembrar el desconcierto durante algunas horas.

Tampoco fueron pocos los personajes que en una actitud carroñera ya se frotaban las manos sintiéndose el relevo obligado de Cisneros; pero no, el muerto estaba vivo.

CISNEROS, RUDO DE NACENCIA

Llama mucho la atención el encono con la que algunos medios de comunicación han tratado la enfermedad de Eric Cisneros; seguramente nos perdimos de alguna parte de la historia de la interrelación entre ambas partes e ignoramos el motivo que despertó tanto odio; pues la enfermedad regularmente provoca una tregua, aun entre los enemigos políticos más recalcitrantes; sin embargo en el caso del Secretario Eric Patrocinio no fue así; la información estuvo matizada de burla y de un tufillo de alegría por su desgracia.

Hasta donde conocemos de Cisneros, su único pecado comprobable es ser rudo; y eso es un estilo que difícilmente cambiará; así es de “nacencia”.

En su terruño, Otatitlán, existe un terreno que divide la iglesia y la escuela primaria, hoy esta bardeado, pero antes no; ahí era en donde, cuando niño, Eric Patrocinio arreglaba a golpes sus frecuentes diferencias con sus compañeros de escuela, lo hacía una, dos o tres veces por semana; así que en el terreno de “los guamazos” difícilmente se les va rajar. Pero por ahorita el “tirito” es con el Covid-19, y ahí la lleva.

DIOS NO CUMPLE CAPRICHOS NI ENDEREZA JOROBADOS

En su quehacer cotidiano, Cisneros prescinde de varias reglas no escritas dentro de la política, lo que les ha resultado un plato muy difícil de digerir a algunos de los que se dedican a la vida pública.

Se sabe que el Secretario prefiere arrimar el caballo que acercar el diálogo.  

Que sí sabe sumar políticamente, pero le gusta que sea en sus tiempos y prefiere que se le acerquen sin presiones; algunos alcaldes que han entendido ese estilo están en el ánimo, pero son pocos.

Estamos describiendo a un personaje que no ganaría un concurso de “míster simpatía”, pero que sí entiende el juego del poder y sabe de su posición de privilegio.

Hablar de esas características lleva la intención de comprender por qué muchos no se la perdonan ni en estos momentos en que está enfermo y hospitalizado.

Aguas con lo que se pide, porque son muchos los temas que maneja y que trae pendientes el Secretario de Gobierno, a nadie convendría un cambio en estos momentos.

Eric Cisneros no sería el primero dentro del Gobierno de Cuitláhuac García Jiménez que libra el contagio y regresa a su cargo, ya lo antecedió el Procurador del Medio Ambiente, Sergio Rodríguez Cortés; así que los que se estaban formando para relevarlo podrían ir rompiendo fila.

CHABELOTE ES PURO Y CASTO

Y si usted andaba con el pendiente de lo que ha sucedido con el ex diputado Chabelote, que fue desaforado por robarse un cadáver y se inmortalizó por sus insultos misóginos contra la Fiscala y su progenitora, y por afirmar que a Verónica Hernández se la comía en tacos.

Pues resulta que se la perdonaron ya y le retiraron la orden de aprehensión que tenía sobre su cabeza.

El “diputaco” pidió perdón en sus Redes, se le vio ya más o menos despojado de la soberbia y altanería que lo caracterizan, leyó unas líneas describiendo los acontecimientos que lo llevaron a ser el Frankenstein veracruzano, alegando aún que se desquició al ver un trato inhumano para el cuerpo del hijo de la amiga de su señora madre; porque, aunque usted no lo crea, sí tiene… ánimos de narrar los hechos que le costaron el desafuero.

Es posible que si sale totalmente absuelto Erick Aguilar no se desistiría de su curul; lo deja ver en un ambiguo: “no es mi prioridad en este momento”; así que ¡aguas!, si para librar los cargos en su contra prometió no regresar al Congreso deberían de recordar que durante su efímera carrera política el Chabelote nunca tuvo “palabra”.

Tan quiere regresar que en la foto de portada de la página desde donde envió su mensaje aún se ostenta como diputado local de la LXV Legislatura. ¡La forma es Fondo!