Candyman ¡Digan su nombre cinco veces!

  • La cuarta entrega del personaje creado por Clive Barker llega en un momento de mucho racismo y brutalidad contra los negros en EU.

CIUDAD DE MÉXICO.

Una de las creaciones del maestro de horror Clive Barker está de regreso.

Candyman, el clásico de terror ha vuelto en una cuarta entrega de la mano del ganador al Oscar, Jordan Peele, como protesta en contra del racismo y la brutalidad policiaca contra los negros en Estados Unidos y el mundo.

La trama se ubica en el viejo pueblo de Cabrini Green, Chicago, donde el pintor Anthony McCoy presenta su obra Say My Name, inspirada en la historia del misterioso fantasma asesino Candyman (Tony Todd), invocado al decir cinco veces su nombre frente al espejo, sin imaginar que su creación traería de vuelta el terror y la sangre al pueblo y a su novia Brianna (Teyonah Parris). La cinta se estrena hoy en las salas de todo el país.

A través de los hechos, la cineasta Nia DaCosta y Peele aprovecharon para manifestar la desigualdad de razas en su país, y no, no lo hicieron para subirse al tren de las tendencias y quedar bien con la gente, pues Barker utilizó su cuento de horror The Forbidden, incluido en sus famosos Libros de Sangre, para exponer la segregación, pobreza y cultura en los barrios de Liverpool, Inglaterra.

Exploro el aspecto en sus múltiples niveles, desde lo incómodo que puedes ser el tema hasta niveles totalmente devastadores. Cuando el público asiste a ver una cinta de horror, en cierta manera se embarca en un contrato: ‘estoy aquí para que me asusten, me traumen y desafíen’. Lo especial es explorar los horrores en la vida real, aquí, Nia expone el horror seminal relacionado con la violencia racial en este país”, explica Peele al hablar de la cinta.

Las acotaciones en la película son muy marcadas, sobre todo desde la frase “Say mi name (Di mi nombre)”, que se usó durante las protestas por el asesinato de George Floyd a manos de la policía.

En una entrevista proporcionada a Excélsior, la actriz Teyonah Parris también cuenta cómo este clásico del género ha perseguido a la comunidad negra en sus peores pesadillas. ¿Quién no dejó de dormir luego de ver a Todd escupir un enjambre de abejas y mostrar su pecho totalmente desollado en 1992?

La vi cuando era joven y fue de esas películas en las que los niños negros la vieron y sufrieron tortura de los hermanos mayores diciendo que mientras estabas en el baño o sólo en tu habitación Candyman estaría ahí, así que siempre tuve miedo de que me atrapara”, explicó la actriz, quien también formará parte de The Marvels.

Interpreta a Brianna, una mujer que tiene una galería y busca hacerse de un lugar en el mundo del arte, por supuesto una chica negra que tiene que trabajar para un blanco en la disparidad de Estados Unidos.

Me gusta cómo Jordan refleja los asuntos de la comunidad negra que todos conocemos y de la que somos parte y es un reflejo bastante distorsionado, es parecido a lo que vemos en su película Nosotros: no logras entender rápidamente lo que ves, pero comprendes el detrás del asunto”, opinó la actriz.

SOBRE LA PELÍCULA

El espíritu de Candyman vuelve a ser interpretado por el actor y llamado Rey del Horror, Tony Todd

Para la primera cinta se había pensado en Eddie Murphy y finalmente Todd se quedó con el papel por sus casi dos metros de altura

Al ser un fantasma cubierto de abejas, Todd, en la trilogía noventera, trabajó con insectos de verdad y recibió 23 picaduras

La historia se desprende del volumen 5 de los Libros de Sangre de Clive Barker

El autor también es padre del cenobita líder, Pinhead, de la saga Hellraiser

 DETRÁS DEL RODAJE

La cinta se filmó en el barrio de Cabrini Green, donde se hicieron las primeras tres, pero tiene una estética distinta

Se contrató a Cameron Spratley y Sherwin Ovid para pintar los seis retratos de Candyman

La necrosis de Anthony McCoy generaría tripofobia (reacción o miedo a los agujeros)