DESATINOCRACIA

DESATINOCRACIA

Por Juan Baizabal

Terminado agosto, el mes de la juventud, he decidido dedicar esta publicación a destacar la trayectoria de un joven político mexicano de la actualidad. Esta selección, se hizo sin pensar en su ideología política-partidista, solo es el hecho de reconocer en sus amplios éxitos alcanzados.

Si bien es cierto, actualmente, en nuestro país, se carece de una figura política que logre reunir todas o la mayoría de las características y cualidades que el maestro Juan José Rodríguez Prats,describe en su libro “Cartas a un joven político”. Y si a esto, le sumamos la variable edad, se vuelve mucho más difícil hallarlo.

Para Rodríguez Prats, la política de hoy, debe ser de responsabilidad y aquella donde los jóvenes tienen un papel sumamente importante e indispensable, por lo que se les deben abrir las puertas y oportunidades necesarias.

Por otra parte, Max Weber, en “El Político y el científico”, hace una clasificación de los políticos e invita a los jóvenes a seguir el concepto de un “político profesional”, y tratar de omitir al “político ocasional”.

Weber refiere a los políticos “ocasionales”, como quienes depositan su voto, aplauden o protestan en una reunión “política”; quienes hacen un discurso “político” o realizan cualquier otra manifestación de voluntad de género análogo.

Mientras que, a los políticos “profesionales” como los delegados y directivos de asociaciones políticas que, por lo general, solo desempeñan estas actividades en caso de necesidad, sin vivir de ellas y para ellas, ni en lo material, ni en lo espiritual. Concepto que lamentablemente se aleja de toda realidad. 

Sin embargo, el joven político que reconocemos hoy, en varias ocasiones, ha externado no depender ni vivir de los beneficios que traen consigo el ejercer el poder.

Samuel Alejandro García Sepúlveda, gobernador electo de Nuevo León, ha tenido una participación y trayectoria única dentro de la política mexicana. Ha sido objeto de amplios señalamientos, complots mediáticos y parodias; un “fifí” para muchos y para otros un claro ejemplo de perseverancia y audacia.

El abogado de33 años de edad, ganó las elecciones a la gubernatura de Nuevo León, el pasado seis de junio del presente año, con 786 mil 808 votos, el 36.71 por ciento de la votación total.

Sin embargo, esta no ha sido la única victoria del regiomontano, en 2018 ganó las elecciones a Senador de República, con 526 mil 359 votos, el 24.21 por ciento de la votación total, y en 2015, fue diputado local por la vía plurinominal.

Una trayectoria única y en ascenso para un joven a tan corta edad, que ha optimizado el manejo de los medios de comunicación y de las redes sociales, que ha cambiado el rumbo de cada ataque a su persona para fortalecerse, obtener popularidad y ganarse confianza de la sociedad.

Y, sobre todo, un joven que ha sabido escuchar a su equipo de asesores y de trabajo, clave de humildad y esencial para alcanzar el éxito.

Seamos o no partidarios de su visión, es innegable reconocer y pensar que Samuel García, puede llegar tan lejos como se lo proponga, tiene una vida por delante, la voluntad, el optimismo y el carisma mediático para hacerlo, a menos que cometa un gran error, como los que ya se han comido por otros gobernadores.

No perdamos la vista, quizá aquí tenemos a un futuro presidente de la República.

Mucho éxito Samuel, a poner en alto el nombre de los jóvenes.