DESATINOCRACIA

DESATINOCRACIA

Por Juan Baizabal

El actual gobierno presidencial se ha caracterizado por la descalificación y censura a medios de comunicación y a periodistas. “El Reforma”, “Revista Proceso”, entre otros más, han sido señalados por el ejecutivo federal, como medios “PRIANISTAS” y neoliberales, por el solo hecho de hacer críticas y no ceder a la imposición del Estado.

La periodista Carmen Aristegui, es víctima del desprestigio, la definen como calumniadora y opositora a la “Cuarta Transformación” por el reportaje “Sembrando vida y la Fábrica de chocolates” publicado en el portal Aristegui Noticias.

En la mañanera de ayer, desde Oaxaca, Andrés Manuel López Obrador, señaló que tal reportaje, busca difamar a su familia y a su gobierno. Puntualizó que los medios de comunicación Aristegui Noticias y Revista Proceso, no apoyan a su movimiento, por lo que están en contra del pueblo mexicano.

Hay que recordar que, en agosto de 2018, el mandatario federal, felicitó públicamente a Carmen Aristegui por su compromiso con el periodismo libre, sin embargo, hoy es acusada de ser parte del bloque opositor y conservador.

Pero la censura, va más allá. A través de un oficio emitido por la Consejería Jurídica, a todos los trabajadores del Gobierno Federal, se les ha prohibido opinar y hacer todo tipo de comentarios sobre el presidente de la República y/o su plan de gobierno.

En el mismo documento, se expone el “Código de Vestimenta y Convivencia en la oficina” que impide mostrar tatuajes y piercings, usar pantalones de mezclilla, desteñidos o rotos; en el caso de los hombres, usar zapatos sin calcetines, playeras y aretes; para las mujeres, el uso de tops y ombligueras, minifaldas y leggins.

Acciones que atentan y limitan la libertad de expresión, no solo en internet y redes sociales, sino también, en prenda y forma de vestir.

Irónicamente una izquierda extremadamente conservadora y autoritaria.