Policía irrumpe en residencia de obispo crítico de Ortega en Nicaragua y se lo llevan

  • Se desconoce el paradero del obispo; las autoridades no han entregado información hasta el momento, mientras algunas voces aseguran que fue detenido y sacado de su residencia.

La Policía de Nicaragua extrajo este viernes de su residencia al obispo de Matagalpa y crítico del gobierno, Rolando Álvarez, en donde había permanecido retenido las últimas dos semanas, investigado por «desestabilizar» el país.

«La Policía Nacional ha ingresado a la Curia Episcopal de nuestra Diócesis de Matagalpa y se ha llevado» a monseñor Álvarez; «aún no se conoce su paradero (…) alertamos a la comunidad internacional y nos sumamos a la cadena de oración», dijo en Twitter el Consejo Episcopal Latinoamericano y Caribeño (Celam).

«Lo sacaron con violencia y no se sabe para donde se lo llevaron», dijo a la AFP Vilma Nuñez, presidenta del Centro nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh), en base a diversas fuentes consultadas por su entidad en Matagalpa. Hasta el momento no existe información oficial sobre el caso.

La propia diócesis de Matagalpa (norte) alertó la madrugada del viernes del ingreso de la Policía a la residencia del obispo.

«SOS. Urgente. En estos momentos la Policía Nacional ha ingresado a la Curia Episcopal de nuestra Diócesis de Matagalpa» donde se encuentra Álvarez, publicó la propia Diócesis de en su cuenta de Facebook en la madrugada del viernes, sin entregar mayores precisiones.

Se desconoce el paradero del obispo y de quienes lo acompañaban en la curia. Las autoridades no han entregado información hasta el momento, mientras medios críticos del gobierno y algunas voces desde el exilio aseguran que Álvarez fue detenido y sacado de su residencia.

«Qué indignante, se han llevado a Monseñor Rolando Álvarez, con los sacerdotes que estaban con él. ¡Basta ya de tanto silencio!, hablen quienes tienen que hablar y dar la cara, a eso se le llama pecado de omisión», dijo el sacerdote Edwing Román, exiliado en Miami, en redes sociales.

«Sucedió lo que era evidente que iba a suceder. Es la detención arbitraria y abusiva del monseñor Álvarez», comentó por su parte, también desde Miami, el defensor de derechos humanos Pablo Cuevas.

Álvarez, obispo de Diócesis de Matagalpa, norte del país, estaba retenido en la curia junto a una decena de personas desde el pasado 4 de agosto.

La policía sitió la curia días después de que Álvarez denunciara el cierre por parte de las autoridades de cinco emisoras católicas y reclamara respeto al gobierno de Daniel Ortega respeto a la «libertad» religiosa.

La policía anunció que la Diócesis de Matagalpa es investigada por intentar «organizar grupos violentos» e incitar al «odio» para «desestabilizar al Estado de Nicaragua».

«Nosotros estamos en las manos de Dios», había dicho el prelado el jueves.