Coatzacoalcos, Córdoba, Xalapa, Veracruz y Orzaba; donde más secuestros hay
|- Estado abandona a los municipios; Coatzacoalcos es primero con 53 secuestros, Córdoba segundo con 52, la Capital Xalapa es tercero con 50, Puerto de Veracruz con 48 y Orizaba con 39 delitos.
- En lo que va de la administración de Cuitláhuac (Dic 2018 a Nov 2022) Veracruz es primer lugar a nivel nacional en casos de secuestros con 920 acumulados, de acuerdo con Alto al Secuestro.
Xalapa
Mientras que el encargado de la política interna del Estado, Eric Patrocinio Cisneros Burgos, tiene serios señalamientos periodísticos de estar siendo investigado por la Agencia Norteamericana de Administración de Control de Drogas, más conocida por su sigla como DEA, y el titular del Ejecutivo, Cuitláhuac García Jiménez, ha demostrado que no puede o no tiene la capacidad para salvaguardar la integridad de los veracruzanos, a pesar de haberse comprometido a terminar con la delincuencia en dos años, simplemente no ha cumplido con su palabra .
De diciembre 2018 a noviembre 2022, el estado de Veracruz ocupa el primer lugar a nivel nacional en casos de secuestros con 920 acumulados, de acuerdo con la organización Alto al Secuestro; en segundo lugar, Estado de México con 826, tercer lugar, Ciudad de México con 407; cuarto lugar, Puebla con 213 y quinto lugar, Morelos con 199.
Así mismo, Veracruz ocupa también el primer lugar de los estados con mayor incidencia en el mes de noviembre 2022, con 10 secuestros; le siguen, Estado de México con 8; Sonora con 5, Baja California y Jalisco con 4 secuestros cada uno.
En cuanto a secuestros por Ayuntamientos veracruzanos, hay mayor incidencia de este delito en las ciudades con mayor crecimiento económico y capacidad adquisitiva, pero con alto grado de marginación y pobreza.
Coatzacoalcos es primero con 53 secustros, Córdoba segundo con 52, la Capital Xalapa es tercero con 50, Puerto de Veracruz con 48 y Orizaba con 39 delitos.
Así y pese al esfuerzo de sus autoridades municipales en brindar seguridad a sus ciudadanos, el gobierno del Estado los ha abandonado, ya que lejos de apoyar a las policías municipales, el Estado se desentiende de los delitos del fuero común.