Aceite de rosa de mosqueta: el nuevo aliado de la belleza que destronó al aceite de coco

Desde hace tiempo, las rutinas de belleza y cuidado personal han apropiado diferentes tipos de aceites por sus grandes beneficios en la piel y el cabello.

Con frecuencia, el aceite de coco se corona como el favorito; sin embargo, otro aceite ya ganó bastante popularidad: el aceite de rosa de mosqueta.

¿Qué es el aceite de rosa de mosqueta?

La rosa de mosqueta es un arbusto que crece en climas fríos y lluviosos, como en algunos países de Europa Central o en la Cordillera de los Andes de Chile y Argentina.

Esta planta produce una flor rosa claro de cinco pétalos, así como un fruto llamado escaramujo, el cual tiene semillas de donde se obtiene el aceite de rosa de mosqueta.

De acuerdo a un estudio de la Universidad de Los Lagos, en Chile, la rosa de mosqueta cuenta con antioxidantes y ácidos grasos esenciales (como el ácido linoleico y linolénico) que influyen positivamente en la regeneración celular de la piel, lo cual es excelente para atenuar líneas de expresión, estrías y cicatrices.

En el Hospital Universitario de Gran Canaria demostró en un estudio que contempló a 108 pacientes con cicatrices, que el aceite puro de semilla de rosa de mosqueta es un gran aliado en la evolución y mejora de estas marcas en la piel.

Un estudio de la revista especializada en farmacia y sociedad Offarm, agrega que el alto porcentaje de ácidos grasos en el aceite de rosa de mosqueta lo hace un excelente hidratante. Lo mejor es que no sólo hidrata, suaviza y mejora la flexibilidad de la piel, también penetra la dermis y mejora su función de barrera.

Este plus a la barrera de la dermis ayuda a prevenir la pérdida de agua y cerrar algunas grietas, las cuales suelen aparecer por el clima frío o la exfoliación constante de la piel.

El aceite de rosa de mosqueta también revitaliza algunas células de la piel, responsables de la producción de colágeno, elastina y ácido hialurónico, los cuales son proteínas y sustancias esenciales para la firmeza y elasticidad de tu cutis.

Por otro lado, los altos niveles de antioxidantes del aceite de rosa de mosqueta combaten los radicales libres que dañan la piel. Dichos radicales son moléculas inestables que dañan las células y se convierten en factores que aceleran el envejecimiento.

Esto antioxidantes combaten el daño oxidativo e igualmente refuerzan la barrera de la piel para prevenir daños futuros por la exposición al sol, a la contaminación, etc.

El aceite de rosa de mosqueta también cuenta con propiedades antiinflamatorias, que ayudan a reducir el enrojecimiento causado por condiciones en la piel, como el acné o la rosácea.

Como podemos ver, el aceite de rosa de mosqueta figura como un excelente aliado para el cuidado del cutis y de la piel en general.

Lo recomendable es comprar productos que obtengan este aceite a partir de un proceso de prensado en frío. De esta forma, los ácidos grasos y vitaminas propias de la semilla se conservan de la mejor manera, a diferencia de las extracciones que implican calor.