Té, infusión y tisana: ¿Cuáles son sus diferencias?
|Las bebidas a base de hierbas y plantas son muy populares en todo el mundo. Aunque se consumen a diario, algunas personas desconocen cuál es la diferencia entre su proceso de preparación. Te contamos más al respecto.
Cuando se habla de bebidas herbales, es muy común pensar que el té, la infusión y la tisana son lo mismo. Sin embargo, aunque su proceso de preparación es muy parecido, hay algunas características específicas que diferencian uno del otro.
Las hierbas y plantas han sido utilizadas desde la antigüedad para dar sabor a las comidas y para mejorar los síntomas de ciertas afecciones leves de salud. Sin embargo, para aprovechar sus propiedades cada preparación es diferente. ¿Te interesa saber más al respecto?
¿Qué es un té?
El té es una bebida que se obtiene solo mediante la infusión de las hojas de la planta de té, conocida como Camellia Sinensis. Este es un arbusto pequeño que proviene del sur de China y sudeste de Asia, aunque hoy en día se cultiva en las regiones de todo el mundo.
El té se caracteriza por tener cuatro variedades: rojo, verde, blanco y negro. Si bien proceden de la misma planta, cada uno cuenta contiene diferentes propiedades y beneficios. A continuación, te contamos más sobre cada una de ellas.
Té rojo
El té rojo era consumido en la antigüedad única y exclusivamente por la nobleza china. Se elabora a partir de la fermentación de las hojas de té verde; luego, se almacena en barricas de roble por un periodo de tiempo de al menos 2 años y hasta incluso más de 50.
Según un estudio publicado en Molecular Neurobiology, el té rojo, también conocido como té de Pu-erh, demostró tener varios beneficios biológicos, como la reducción de lípidos en la sangre, la pérdida de peso, la eliminación de radicales libres, entre otros.
Té verde
El té verde es el más popular dentro de las variedades disponibles. A diferencia del té negro, no es sometido a ninguna oxidación durante su proceso, ya que las hojas se recogen frescas, se enrollan y se trituran para, posteriormente, secarse.
A esta bebida se le atribuyen varios beneficios para la salud, como lo sugiere una revisión publicada en Nutrients, en la que se destaca su efecto protector contra enfermedades cardiovasculares y neurodegenerativas. No obstante, todavía no hay evidencia clara sobre la dosis óptima para obtener estas bondades.
Té blanco
Este es el té menos procesado de los cuatro, ya que sus hojas se dejan marchitar y después se secan a los rayos del sol. Al parecer, esta es la razón de los beneficios que representa para la salud.
En relación a esto, una publicación de Food and Function sugiere que su potencial antioxidante podría ayudar a prevenir enfermedades degenerativas y asociadas al envejecimiento prematuro.
Té negro
El té negro se caracteriza por tener un sabor más fuerte y una mayor cantidad de cafeína que los otros. Con frecuencia se le mezcla con otras plantas como Earl Grey, English Breakfast o chai, para aportar diferentes sabores a la preparación.
En cuanto a sus propiedades, una revisión publicada en The Journal of Nutrition expone que, gracias a su actividad antioxidante, podría ayudar a detener el daño oxidativo de los radicales libres en el ADN. Sin embargo, se necesita más evidencia al respecto.
Por otro lado, en una publicación de International Journal of Health Sciences se le atribuye potencial para disminuir la inflamación y reducir el riesgo de padecer enfermedades crónicas. Además, se sugiere que su consumo contribuiría a reducir las posibilidades de sufrir problemas cardiovasculares.
¿Qué es una infusión?
La infusión es el resultado de añadir las hojas y las flores de alguna planta en agua muy caliente, pero no a punto de ebullición. Esto se debe a que las altas temperaturas pueden hacer que se pierdan algunas propiedades, sobre todo si se usan partes delicadas como las flores.
A continuación, se deja reposar unos minutos para que se desprendan los principios activos de la planta y se cuela. También, se pueden colocar los ingredientes desde el principio, revolverlos mientras se calienta el agua y apagar el fuego antes de que esta empiece a hervir.
¿Qué es una tisana?
El proceso de preparación de esta bebida es similar al de la infusión. Su diferencia radica en que las tisanas se hacen a partir de la combinación de hierbas o especias que se dejan hervir en agua durante al menos 15 minutos. Esto hace que su sabor sea más intenso.
Para su elaboración, se pueden utilizar frutas deshidratadas, flores, hojas, raíces, bayas y semillas de plantas comestibles. Dentro de las hierbas más usadas se encuentran la manzanilla, la lavanda, la menta y la hierbabuena. Estas, además de aportar un agradable sabor, son conocidas por brindar varios beneficios para la salud.
Entonces, ¿cuáles son las diferencias entre té, infusión y tisana?
Considerando lo anterior, hemos de decir que las diferencias entre té, infusión y tisana es su forma de procesamiento y elaboración. Esto, en general, determina sus propiedades medicinales y organolépticas.
En cualquier caso, son bebidas que pueden contribuir a mejorar la salud, sobre todo cuando se incluyen en el contexto de una alimentación equilibrada y sana. De todos modos, antes de consumirlas de manera regular es conveniente consultar al médico. No hay que ignorar que están contraindicadas en algunos casos.