Desde 1996 lo impuso el gobierno federal El Horario de Verano debería disminuir la emisión de contaminantes
|- México atrasado en la lucha contra el cambio climático, difunden expertos.
Amadeus Olivarex
Martínez de la Torre, Ver.
Como un tormento califican muchas personas la imposición del horario de verano, dado en el año 1996, porque afirman se desajusta su cotidiano horario de descanso, “al robarles una hora de sueño”, por lo que claman termine ya tal medida gubernamental, pues aunado al malestar de parte de la población, dicho ajuste en las manecillas del reloj no ha servido para disminuir la emisión de contaminantes que han venido generando el calentamiento global y el cambio climático.
Cuando se refiere a emisiones contaminantes, se detalla, se trata del gas de efecto invernadero que producen las plantas eléctricas que consumen combustibles fósiles, caso del petróleo y carbón, principalmente, secundadas por el transporte público, la agricultura, especialmente la ganadería, cuando en el Acuerdo de París, firmado en el año 2015, México pactó disminuir el 22 por ciento la emisión de tales contaminantes, estableciéndose como plazo máximo, el año 2030.
Pero no se está viendo ese avance en el combate al calentamiento del planeta, como tampoco está a la vista el uso preferente de fuentes de energías renovables, caso de energía eólica, por ejemplo, lo que incluye el cuestionado beneficio del “horario de verano” que, en el presente año, concluye en la noche del 30 de octubre y se renueva en el mes de abril del 2022, se apuntó.