“Una vida llena de esperanza”

VIVIR CON ESPERANZA

“Una vida llena de esperanza”

Por JACINTO ROJAS RAMOS

En el interior del ser humano es donde se enfrenta la vida y se eligen las actitudes. Una vida llena de sentido y de esperanza es la que contesta cada mañana a la pregunta: ¿Vale la pena el día de hoy?, con «sí» entusiasta, porque responde pensando que hay una esperanza que sostiene, anima y fortalece.

El sentido de la vida se descubre cuando se ve el rostro feliz de aquél a quien se ama; por ello, la alegría proviene del interior, de la decisión personal de donarse a alguien; y todos los que alguna vez han hecho la prueba, tienen que aceptar que el resultado es positivo. «Hay más alegría en dar que en recibir». La alegría genuina ilumina el espacio humano que toca. La persona que la vive llena de esperanza, irradia a su alrededor una forma nueva de ver los acontecimientos.

La realidad no cambia, pero sí los ojos con que se le ve. Camina el pesimista callado, taciturno y maldiciente. Camina el lleno de esperanza confiado, alegre, lleno de vida y de seguridad. Se queja el pesimista del sol, del aire, del agua y del viento. Bendice la persona llena de esperanza al viento, al sol, al agua y a todo lo que encuentra en su camino. Los días son pesados y duros para el pesimista. Los días son bendiciones del cielo que recibe el lleno de esperanza. El que vive de esperanza se endereza camino de la luz y del porvenir. La tierra le brinda sus sonrisas en las flores, y el cielo le brinda sus sonrisas en las estrellas. La luz del sol penetra hasta su corazón y le da vida, fecundiza sus fuerzas y fortalece su voluntad, reanima su espíritu con esa poesía que se palpa y que se siente, y que brota de los labios para comunicarse al mundo y derrama la dicha en su derredor. Así marcha el lleno de esperanza por el mundo. Sus días son triunfos. Vive las horas de la vida con su vida poderosa que hace vivir las horas.

La vida se siente, se palpa, porque cada goce arranca una sonrisa, y cada tropiezo arranca una palabra de aliento, de emoción, de empuje. La vida del optimista está llena de esperanza.

Espera de hoy, espera de mañana, y las esperanzas del mañana las haces realidad hoy. Los obstáculos le enardecen, las miserias no le afectan y mientras más duros son sus golpes y más grandes sus caídas, más sonriente y más grandioso se levanta. La gloria de la vida, la pujanza vital de ser engreído con la victoria, forma su entereza y va por su camino derramando aliento, sembrando energías, despertando ambiciones nobles y conquistando corazones amigos, que le contemplan en su lucha colosal, le imitan y le siguen.

La vida del hombre con esperanza es corriente de vida y de luz, y los que se envuelven en ella, viven la vida de gloria y de trabajo, santificada por las edades, y escrita en los libros de granito que guarda la historia de los hombres vencedores. La vida te llenará de vida en la medida que la vivas con sencillez, esperanza y con aptitudes positivas. Ojalá que en tu entorno marques la pauta y así irradies esta luz de esperanza.

rrjacinto_9@hotmail.com