XALAPA HUELE A HECES FECALES DE LOS CANES

60 SEGUNDOS

RAUL GONZALEZ RIVERA

XALAPA HUELE A HECES FECALES DE LOS CANES

Cierto es que los canes o perros, se erigen en muchísimos ejemplos como los fieles compañeros del hombre, pero hay tantos ordenamientos jurídicos y legales que regulan la convivencia entre los seres humanos y que alcanzan el cuidado de los animalitos, pero sin embargo, las calles, jardines, banquetas y esquinas de nuestras arterias públicas apestan a las heces fecales que aquellos depositan, y que sus amos y dueños, difícilmente levantan y llevan a un mejor confinamiento.

                Es más, existen a saber agrupaciones destinadas a ver por la protección de los animales y en muchos casos, los bárbaros que se han atrevido a maltratarlos, han tenido que ser sancionados administrativamente, cuando son sorprendidos en infraganti azuzando o golpeando a alguno de los perros callejeros y los que no lo son también, empero, todas las calles de la ciudad huelen a orines y exhiben heces fecales, abandonadas.

                A pregunta que hizo este reportero a un joven que gusta de pasar tres veces al día a su pequeño can en varias de las arterias públicas enclavadas en lo que es el caso histórico de la otrora Atenas veracruzana, sobre los acuerdos invocados por legisladores, para abatir no solo el maltrato a los animalitos, sino que sus dueños cuiden de recoger las heces fecales de los suyos, el muchacho toda soberbia, respondió textualmente “los diputados que vean cómo salvar del hambre y el desempleo a los jóvenes” y se dejen de perseguir a los perritos.

                En un pasado no lejano, funcionó un incinerador, hasta donde muchas personas canalizaban a sus canes, cuando estos o ya no tenían remedio y enfrentaban una enfermedad incurable, o los propios trabajadores del ayuntamiento, andaban a la caza de mascotas para confinarlas y darles fin en el crematorio canino, que se localizaba sobre terrenos colindantes con la carretera a la congregación de El Castillo.

                Y es que lo malo comienza cuando los amos o dueños de numerosas mascotas, salen todos los días con el objetivo de ejercitarlos, con la consecuencia obvia de que a su paso por las calles de la ciudad orinan y no lavan los espacios ni los jardines públicos, como tampoco llevan a cabo ninguna medida sanitaria, consistente en lo elemental que es recoger sus heces fecales.

                Es tal la cantidad de canes que son sacados por sus amos a recorrer las arterias públicas que se confunden con el ejército de personas que igual, no obstante, enfrentarse la constante de contagios por el coronavirus, es la hora en que tanto autoridades sanitarias, como edilicias, no rinden un mensaje, ni dictan una sola medida que si no es coercitiva, en cambio que sí motive a la sociedad protectora de animales, para que coadyuve llamando a los dueños de perritos a  mantener los espacios libres de los millones de agentes contaminantes, porque en el fondo, lo que se expone es la salud pública.

                Por otro lado, la imagen de la ciudad, a decir de visitantes y propios, es que son tantos canes en la calle que muy lamentablemente todo apesta a estiércol y orines y no todos los días llueve, y los propietarios de esas mascotas en mayoría son ajenos a aplicar cualquiera de las medidas de sanidad existentes en esta asignatura.

                Hay quienes aseguran que así como ahora difícilmente una familia cuenta con espacio para una biblioteca en su residencia, lo suyo ocurre con la ausencia de áreas suficientes para el esparcimiento de las mascotas. Esperemos.

MEXICO, SIN PARTIDOS POLITICOS CONFIABLES, NI LIDERES RECONOCIDOS

La elección presidencial del año 2018 dejó hecho trisas el sistema de partidos políticos, a grado tal que la recomposición de estos membretes está costando verdaderos retos, debido a que no hay siglas confiables ni líderes a la vista, en los cuales la gente se pueda ver identificado si de luchas sociales se trata.

Nadie a estas alturas lo creería siendo un sensible espectador de la vida pública nacional. Aun los estados más conflictivos existentes en el mundo, acuden a sus días de comicios electorales apoyados con decenas de siglas y proponer a sus candidatos. Militantes y simpatizantes, en cualquier lugar del planeta, se muestran más avispados y determinantes para nominar a sus abanderados en las más diversas contiendas por el poder público.

Los partidos del momento PRI, PAN, PRD y Morena inclusive, están en un verdadero desgreñadero hacia sus interiores, por ganar puestos en sus directivas principales.  Inclusive se podría asegurar que la gente ignora los nombres de sus dirigentes locales, menos los de orden nacional. No hay dirigentes en los cuales la militancia de partidos, se pueda confiar y depositarles sus más apremiantes exigencias y necesidades sociales.

El último jalón de los albiazules, cifraba sus esperanzas en que “México Libre” con Margarita Zavala a su cabeza, no Felipe Calderón Hinojosa, bien podrían iniciar la reconquista por la salvación de las fuerzas conservadoras del país. Era lo más serio, en cuanto a la oposición del ala de la derecha o la ultraderecha.

Morena, al estilo del viejo partido tricolor, entre jaloneos, sus aspirantes al cuadro dirigente de su sigla, con un desparpajo sin precedentes, da muestras de que así lo hizo el PRI al arrancar como el partido de los tres sectores sociales. En el pleito por la dirección nacional hay cuando menos siete u ocho precandidatos, los cuales ya registraron sus nombres y va de todo, como puede verse, entre sus tiradores, de chile, de dulce y frijol.

Gilbrán Ramírez, el joven politólogo, quien desde los 14 años de edad es simpatizante de AMLO dejaría los micrófonos y la escena de la cámara televisiva, desde la cual, dirige programas de análisis político, asegura que para dirigir a Morena se requiere algo más que vocación para servir a los demás sin ningún condicionamiento.

 Y enseguida, avista con malos ojos, que también busque la dirigencia partidaria, el ex dirigente del PRI y del PRD, Porfirio Muñoz Ledo, considerado como uno de los siete sabios de la política mexicana, durante el periodo del “presidencialismo exacervable” cuando más influencia ejerció el PRI en uso del poder.

En efecto, el grueso de los contendientes por la chamba de dirigente de Morena, más lo que pareciera que buscan son los huesos públicos y no conducir los trabajos que lleven realmente a una transformación de la vida pública nacional, que tenga como base una plataforma ideológica, que se sustente en una fuerte dosis de patriotismo y que recobre lo que en un pasado ya lejano se dio, como es el sentimiento de lealtad al país en que se vive.

Esto es lo que están experimentando los grillos del altiplano, porque en la provincia no se canta mal las rancheras. Los partidos políticos, sin ninguna brújula que dirija su rumbo, siguen sin hacer acto de presencia ante un electorado que cuando decide por un cambio, simplemente acude a las urnas electorales y emite su voto.

Sin embargo, en este momento, los aldeanos de Veracruz están pensando en nombres propios, no siglas partidarias, en el tiempo que les queda libre, porque la zozobra, angustia y temores siguen puestos en la pandemia, en el desempleo que incide y la inseguridad pública, que no cesa en causar el mal a la humanidad y los daños a una sociedad agobiada y metida en el hartazgo.

MURO E IMPUESTOS A REMESAS Y MIGRANTES, AMENAZAN AL PAIS

Ojalá sea solo una cita que al calor de la campaña electoral que se lleva a cabo en los Estados Unidos de Norteamérica, haya soltado el magnate Donald Trump y no quiera cumplir su amenaza una vez que lograra su reelección como presidente del país del tío Sam.

La advertencia pende de un hilito. Nadie duda que los excesos en el mandato presidencial del millonario Donald Trump, lo orillan a externar semejante amenaza, cuando el México vapuleado de estos días carece de los recursos para poder pagar la construcción de un muro que divida la frontera entre los dos países.

Peor aún, si los mexicanos que huyeron de México porque aquí les faltaron las oportunidades del trabajo que consiguieron en tierra gringa, tengan que pagar una contribución fiscal por enviar las remesas que sostienen a sus familias y que en este año rebasarán los 40 mil millones de dólares, se vean en la obligación de cubrir un impuesto, lo que provocaría además que los migrantes redujeran los envíos del billete verde, así de fácil.

Lo otro, que quienes migren a través de la frontera con el coloso vecino del norte, tenga que pagar una tributación fiscal, provocaría en los mexicanos una verdadera catástrofe económica. Los intercambios comerciales entre ambas naciones alcanzan los mil 500 millones de dólares diariamente. Y de las bondades de este comercio se benefician tanto aztecas como gringos.

Cabe destacar que una respuesta categórica a la advertencia del yanqui Donald Trump, no la ha habido desde este lado del río Bravo.

Inclusive, se piensa que solo sea una bravata elevada al aire, por el abanderado del partido republicano, quien en las encuestas va por debajo de Joen Biden, cuando menos en diez puntos porcentuales. La campaña que promueve Trump, provoca mayores odios en una sociedad gravemente dividida por el color de la piel, los bolsillos y la capacidad para enderezar los blancos tanto rencor hacia los mexicanos que habitan aquí en suelo mexicano como en contra de los que ofertan mano de obra barata en la mayoría de los 50 estados estadounidenses.

El mundo es otro, sin duda, la tentación de los supuestos demócratas se encuentra a la vuelta de la esquina, para transformarse en dictadorzuelos, creyendo que con ellos se salva el planeta. Bielorrusia, da el ejemplo de lo que ya no debe seguir siendo en ninguna parte donde la nueva realidad asoma y deja su estela de pobreza, enfermedad y muerte. Es todo.