HUACHICOLEO HASTA EN SALUD

AL PIE DE LA LETRA

Raymundo Jiménez

HUACHICOLEO HASTA EN SALUD

El 10 de octubre del año pasado, la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) informó que casi 38 mil piezas de medicamentos oncológicos habían sido robadas del almacén de la empresa Novag Infancia.

Al hablar con los familiares de los niños con cáncer, las autoridades mencionaron que estos medicamentos hubieran sido destinados a sus tratamientos. La desaparición de estos productos no era sólo uno de los eventos más desafortunados para estos pacientes y sus familias, sino también uno de los sucesos más extraños ocurrido en el campo de la salud en México.

“¿Cómo llegamos a esto?”, se preguntaron algunos médicos y analistas en políticas de salud como Xavier Tello, quien publicó un amplio texto en la revista Nexos.

Hoy, casi un año después, el diario Excélsior reveló que desde el lunes antepasado, el Hospital Infantil de Veracruz prohibió el ingreso de medicamentos oncológicos provenientes de las organizaciones civiles que apoyan a los niños con cáncer.

Lo anterior, según publicó su corresponsal Lourdes López, se debe a que autoridades federales investigan el presunto robo de medicamentos, pues no han llegado al hospital porteño, pese a que el Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi) aseguró haberlos enviado desde meses pasados.

Y es que de acuerdo con esta versión periodística, las madres de los niños con cáncer que son atendidos en el hospital infantil pusieron al descubierto que los tratamientos que les estaban aplicando a sus hijos eran los que estaban donando las organizaciones civiles y no las que presuntamente había enviado el Insabi.

Susana Lara, presidenta local de la Asociación Mexicana de Niños con Cáncer (Amanc), declaró que la prohibición del ingreso del medicamento pondrá al descubierto que los oncológicos que según envió el Insabi no están llegando.

De acuerdo con la representante de Amanc, las medicinas ahora están llegando directamente a los pacientes por parte del Insabi para evitar que “se pierdan en el camino”, como ha venido ocurriendo.

Derivado de estos hechos, se presume que dentro de la Secretaría de Salud de Veracruz ya se habrían dado cambios en el personal que maneja los medicamentos.

En el gobierno federal ahora estalló otro escándalo, pero por los biológicos contra el Covid. Ayer, el columnista Raymundo Riva Palacio publicó en el diario El Financiero: “Ante la pregunta planteada en esta columna el viernes pasado sobre por qué, si había 18 millones de vacunas anti-Covid almacenadas, el presidente López Obrador seguía pidiendo al presidente Joe Biden ayuda con dosis y el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, continuaba de compras en el mundo para alcanzar la inmunización, ya hay una respuesta de funcionarios federales: se perdieron. Nadie sabe en el gobierno dónde están millones de vacunas por las que la Secretaría de Hacienda desembolsó 44 mil millones de pesos, pero tampoco, por si lo primero no fuera suficiente, se ha iniciado una investigación para rastrear qué sucedió, deslindar responsabilidades y castigar a los culpables de esta negligencia criminal”.