Un examen de sangre ya puede detectar el cáncer 10 años antes de que se manifieste: salvará vidas

Una novedosa prueba de sangre es capaz de detectar cualquier tipo de cáncer hasta 10 años antes de los síntomas: te explicamos en qué consiste la biopsia líquida.

Los exámenes de sangre son una prueba común como parte de las revisiones médicas generales para comprobar el estado de salud de los pacientes, pues revelan los niveles de colesterol, azúcar, triglicéridos, entre otros.

De esta manera, los médicos pueden advertir sobre el posible riesgo de alguna enfermedad y prevenirla a tiempo, una situación que, usualmente, no sucede con el cáncer.

Cuando los tumores cancerígenos son detectados, hay casos en los que la enfermedad se ha propagado por diferentes órganos y resulta complicado detenerla. Existen otros tumores que pueden ser extirpados a tiempo o que requieren un tratamiento fármaco para eliminarlo.

En cualquier caso, el cáncer suele ser complicado de detectar y es por esa razón que, a veces, resulta demasiado tarde para combatirlo.

Sin embargo, los investigadores en medicina están trabajando en una prueba conocida como biopsia líquida, la cual es capaz de detectar signos de cáncer en el ADN hasta 10 años antes de manifestarse en el organismo.

La biopsia líquida es una tecnología que ha estado en desarrollo desde hace algunos años; sin embargo, científicos del Centro Oncológico Memorial Sloan Kettering (MSK), en Nueva York, mejoraron la prueba para que pueda detectar cualquier cáncer, pues antes solo identificaba algunos tipos.

La prueba es tan sencilla como un estudio de sangre de colesterol. Los pacientes acuden a un laboratorio para extraer una muestra de sangre y el líquido es sometido a un test que puede diferenciar entre el ADN normal y las muestras genéticas con signos de cáncer.

De acuerdo con el MSK, la biopsia líquida puede detectar mutaciones de cáncer comunes entre 129 genes distintos utilizando una sola prueba de sangre.

Los genes infectados con cáncer comienzan a circular por el torrente sanguíneo antes de que se manifiesten los primeros síntomas. Es por eso que la prueba ayuda a detectar el ADN tumoral y detener su propagación antes de la formación de tumores.

Este es uno de los avances más importantes en los últimos años en la investigación contra el cáncer, pues, para detener el cáncer, los médicos necesitan identificar la mutación genética que lo ocasiona, algo que solía ser complicado.

Con la biopsia líquida, basta con una prueba rápida de sangre para que los oncólogos sepan de inmediato qué es lo que tienen que atacar y cómo hacerlo.

La biopsia líquida resultó ser efectiva para identificar tumores cancerígenos con antelación en 90% de pacientes infectados de cáncer que participaron en una prueba piloto.

Los investigadores creen que la biopsia líquida será especialmente benéfica para las formas de cáncer más mortales que se identifican tarde, como el de pulmón, páncreas y ovario.

De esta manera, las pruebas de sangre para detectar las enfermedades podrían reducir la tasa de mortalidad del cáncer en un 45%

La biopsia líquida ya se utiliza como una prueba de rutina en el MKS; sin embargo, la tecnología todavía está en desarrollo para llegar a más centros oncológicos en diferentes partes del mundo y que sea accesible.

En la actualidad, una biopsia líquida es costosa, pues puede alcanzar hasta los $1,500 dólares; sin embargo, el plan a mediano plazo es reducir los costos del análisis y hacerla accesible para cualquier persona como parte de una revisión común.

Según los investigadores, en un futuro no muy lejano, las personas podrán acudir a un laboratorio para hacer una prueba de colesterol, azúcar y detección temprana de cáncer.

Las pruebas científicas a veces se salen de control y eso queda reflejado en la cinta El Experimento, basada en el polémico experimento de la cárcel de Stanford.