EFECTO COLOSIO

AL PIE DE LA LETRA

Raymundo Jiménez

EFECTO COLOSIO

La semana antepasada causó revuelo una encuesta publicada por un diario capitalino, en la que el joven alcalde de Monterrey, Luis Donaldo Colosio Riojas, de Movimiento Ciudadano (MC), aparece con 27% de las preferencias electorales rumbo a la sucesión presidencial de 2024.

Superado sólo por 4 y 3 puntos porcentuales por el canciller Marcelo Ebrard (31%) y la Jefa de Gobierno de la CDMX, Claudia Sheinbaum (30), los dos aspirantes más fuertes de Morena para suceder al presidente López Obrador.

El resultado sorprendió porque el hijo del excandidato presidencial del PRI, Luis Donaldo Colosio Murrieta, asesinado en 1994 al término de un mitin en Tijuana, no ha hecho el mismo activismo político ni se ha promovido mediáticamente con la misma intensidad como lo han venido haciendo desde hace medio año este par de precandidatos morenistas.

Ello, obviamente, despertó el celo de otros aspirantes, como el dirigente nacional del PRI, Alejandro Moreno, quien además de recordar que “el nombre de Luis Donaldo Colosio es priista” afirmó que “el joven Colosio puede ir a cualquier lugar de la República y se para y no lo conocen en ningún pueblo”. Pero de los siete aspirantes encuestados, el único priista que figura con 10% de aceptación es el gobernador del Estado de México, Alfredo del Mazo. Por supuesto que a Colosio Riojas le favorece el popular apellido y la historia trágica de su padre. Pero el alcalde regiomontano ha iniciado una administración municipal que comienza a llamar la atención por su estilo de gobierno. Inés Carrasco, maestra en Relaciones Internacionales y licenciada en Historia, acaba de publicar un texto en el diario Excélsior, en el que destaca el “gabinete paritario, con una mujer en el segundo puesto más importante” y “una feminista antimilitarista liderando el Consejo de Seguridad”.

 “Un alcalde que todas las semanas atiende a más de 300 ciudadanos de forma directa. Una mujer trans que lidera la Comisión de Género. Un hombre con discapacidad que lidera la Comisión de Equidad y Grupos Vulnerables. “Personas de la tercera edad bailando con una banda en vivo en el Palacio Municipal. “Tatuajes, tenis, jeans rotos y uno que otro traje. “Eso se ve en una semana en el Palacio del Ayuntamiento de Monterrey, Nuevo León. “(…)

Hoy las vallas se utilizan no para impedir el paso, sino para canalizar a las decenas y a veces cientos de personas que se atiende el Miércoles Ciudadano –día en el que representantes de todas las dependencias municipales, que incluyen trámites directos, acompañan al alcalde en 5 horas de atención al público–. “Afuera, los guardias son los primeros en darle la bienvenida a las personas que vienen a hacer trámites, a juntas, a eventos, o simplemente, a usar los baños. Ahora, la instrucción es ésa: un trato amable, una apertura, una disposición que privilegie a la gente. Cuando llegan manifestantes, el primer contacto es concertación social, no una fuerza de seguridad. “Adentro, es común que las reuniones de toma de decisión más relevantes incluyan a personas de 26, 30 o 35 años, además, por supuesto, del alcalde mismo.

Quienes cuentan con mayor trayectoria o experiencia, reconocen y respetan el trabajo de sus ‘compañeres’ más jóvenes. En general, por su calidad humana, pero, en particular, porque los jóvenes son sus pares y, en muchos casos, sus jefes. Y sí, en el Ayuntamiento de Monterrey se oye la palabra ‘compañere’.

“La pluralidad y la vida que se respira en el municipio responden a una de las necesidades más grandes de este país: la búsqueda de una reconciliación. En esa encomienda, es difícil imaginar un personaje con mayor legitimidad que la de Luis Donaldo Colosio Riojas. Sin embargo, entendiendo esto se explica la afinidad que tiene con quien nombró como secretaria del Ayuntamiento y su número dos, Lucía Riojas. Lucía y Luis coinciden en un punto clave: la respuesta que ambos han encontrado a la adversidad ha sido el de hacer comunidad desde el genuino interés en las personas…”