MUJER DE TEMPLE

Musa Peregrina

Pocos soportan a una mujer de temple duro y buen carácter.

Muchos piden una y cuándo por fin la conocen le temen porque les sabe a :

Muy arrogante, demasiado determinante, exigente, fuerte, rebelde, libre, poderosamente tierna, endiabladamente segura de si misma y por si fuera poco, sensible, empática y sencilla.

Descubren que no son fácil de manipular. Se vuelven una mujer difícil para los que no están a su nivel. Ni están dispuestos a estarlo.

Porque resulta que no son sumisas, ni obedientes, ni conformistas, ni calladas. Que no viven bajo la sombra de nadie, ni a costillas de un hombre, sino a la misma altura, con o sin tacones.

Una mujer así, no combina con la mediocridad de nadie.

Ni con el miedo de un hombre.