Crónicas de una mujer

Flor Ángel León

 Sacó las sabanas manchadas, se percató que algo raro tenían ¡sangre!, ¿De dónde?, todavía no era día 23 del mes apenas una semana antes terminó el período. Y había empezado la ovulación?, entonces recordó la noche al lado de su hombre, su amor ….

  Llegaste como de costumbre, tus besos me agobiaron, tu olor como siempre a sudor a mugre, pero ahora era algo muy distinto un olor a dulce, muy ligero, muy sutil

– ¿Hay de cenar? preguntaste

–  Te respondí que sí

 Cenaste como de costumbre en silencio una leve sonrisa se escapó de tu rostro, al comer no gesticulas, te observaba, pensaba en muchas cosas y me entro la curiosidad empecé por tras esculcar todas tus cosas …  nada extraño, el baño llego en pocos minutos, y la ropa no la sacaste. La sospecha fue grande, entré al baño y la levanté, encontré un jazmín, la rabia se apoderó de mí, mil pensamientos llegaron sin fin ¡se va a morir!

 Furiosa espere a que salieras de la regadera tenía ya las preguntas lista para hacerlas, la duda me castigaba: ¿con quién?

– ¡hace calor! dijiste

 una lagrima se me quiso escapar y moví la cabeza en sentido afirmativo, te acercaste y una escalofrió por mi espalda sentí, no podía ser que alguien se fijara en ti, … todo cochino con el tiempo comprometido, enfurecí, mi corazón empezó a palpitar, tus manos por mi cintura empezaron a bajar, sé que no tengo veinte años y que tengo unos Kilos de más , pero ¿porque? … besaste mi cuello despacio, nunca has usado bigote, no pica … es suave, deseaba que nada fuera cierto, mis manos temblaban de rabia, esa rabia se hizo más grande cuando me recostaste en la cama, estabas desnudo oliendo a limpio a jabón…¡ te siento distinto!

No supe cómo, pero ya me mordías las piernas mientras me preguntabas como me había ido en la escuela, en el trabajo, …de pronto un espasmo sentí … era nuevo. Tantos años juntos y nunca te lo había sentido así,

– ¡No voy a reprochar! me dije, esperaré para investigar: ¿quién es?,  ¿cómo es?

 Mi falda ya no la tenía puesta sentí un cosquilleo en las ingles – ¡no repuse!, sin detenerte la blusa empezó a desbotonarse, – ¡No, por favor! más insistente, y tus brazos fuertes detuvieron mis manos, el calor empezó a llegar creí que era normal y las ganas de que me tomaras y que me amaras se apoderan de mí.

 Inconsciente no pude resistir un torbellino,… me hizo sentir los besos más hermosos, los labios carnosos, los sentí por todo mi cuello por mis pechos que respondieron con gran gratificación a tus deseos, pensé ¡oh Dios!  ¡Esto es el cielo o el infierno!

 Súbita y rápido mis piernas quedaron en una posición muy abierta entraste como entra el viento de otoño a las casas, rápido,… ni frío ni tibio, con un olor a te quiero con sabor a los viejos recuerdos, nunca había sentido tanta virilidad en ti, me empezó a doler la parte baja del abdomen y una humedad como nunca empecé a sentir,… la palpitación se hizo más intensa esto solo lo había escuchado en las novelas, en algunas pláticas.

 Sentí un desgarro, dolor fuerte e intenso… ¡grité!!!  al mismo tiempo que llego un hermoso y placentero orgasmo (me dio pena) pero sentí la infinita necesidad de que me siguieras besando, amando, no tuve noción del tiempo creo que paso mmm  más de una hora, cuantos gritos di, no lo sé, tal vez los confundí, al final caí sobre tu cuerpo y dormí.

Ahora que los rayos de sol evocan mis recuerdos, creo que la virginidad mental la perdí, me desgarro nuevamente la inocencia, nunca pensé que de unos celos enfermos se pudieran realizar deseos intensos, … amanecieron unas flores hoy en la mesa, jazmines, con una nota que decía:  ¡Feliz aniversario mi amor!

 Tonta me digo ahora, soy una señora y que importa si tiene a otra, ¡yo lo tengo a él!