“Vamos a cuidar su legado, presidente López Obrador”; Sheinbaum arranca campaña

  • Con el compromiso de continuar los programas sociales y proyectos prioritarios de la 4T, la aspirante enumeró las 100 acciones de su programa de Nación.

En el inicio de su campaña presidencial, Claudia Sheinbaum refrendó su compromiso de avanzar en la transformación del país iniciada en 2018.

Ante 350 mil simpatizantes en el Zócalo, de acuerdo con el gobierno capitalino, la candidata de Morena, PVEM y PT dijo que forma parte de un movimiento social y no llegó sola.

Tengo claro que nos tocará guardar el legado de un hombre que está hoy en Palacio Nacional (…) a ese hombre, Andrés Manuel López Obrador, le decimos: Vamos a cuidar su legado,” afirmó la candidata.

Al enumerar las 100 acciones de su proyecto de Nación, Sheinbaum aseguró que mantendrá los programas sociales y los proyectos prioritarios del actual gobierno. Entre sus propuestas están que mujeres de 60 a 64 años reciban un apoyo equivalente a la mitad de la pensión para adultos mayores.

“VAMOS A CONSTRUIR EL SEGUNDO PISO DE LA TRANSFORMACIÓN”
La candidata presidencial de Morena, PT y Partido Verde Ecologista, Claudia Sheinbaum, inició su campaña electoral con el Zócalo de la Ciudad de México desbordado por seguidores, militantes y simpatizantes de la Cuarta Transformación.

Al iniciar su discurso, aseguró que la gente deberá tomar una decisión histórica el próximo 2 de junio en las urnas: transformación o corrupción.

Este 2 de junio, el pueblo de México tomará una decisión histórica. Sólo hay dos caminos a tomar este 2 de junio: uno, que siga la transformación, el otro, que regrese la corrupción. ¿Qué dice el Zócalo de la Ciudad de México, que siga la transformación o que regrese la corrupción?”, expresó.

A Andrés Manuel López Obrador le decimos: vamos a cuidar su legado y sepa, Presidente, que el cierre de su gobierno será espectacular, porque una vez más, con el pueblo de México, estaremos haciendo historia”, afirmó.

En la capital del país, que gobernó como exjefa de Gobierno, dio a conocer los 100 puntos de su campaña, en los que destacó el anunció de un programa para que a partir de 2025, un millón de mujeres de 60 a 64 años reciban un apoyo bimestral equivalente a la mitad de la pensión de 65 años y más.

También se comprometió a poner en órbita un nuevo satélite mexicano que va a contribuir a las comunicaciones.

El centenar de propuestas de la candidata presidencial aborda la continuidad y reforzamiento de programas, obras y la promesa de cumplir las reformas constitucionales del presidente Andrés Manuel López Obrador en materia electoral y al Poder Judicial.

Adulto mayor con un sombrero con el nombre Claudia.
Pero también el proyecto propio para la implementación de energías sustentables, la simplificación y digitalización de trámites en México, una revisión real a las concesiones de agua en el país, y en materia de género la protección a las mujeres para la salud sexual y reproductiva, y la creación de mecanismos que coadyuven a la erradicación de la violencia de género.

Con el objetivo de atender a las mujeres víctimas de violencia, dijo que creará un programa de ayuda como lo hizo en la Ciudad de México. Se comprometió a que sea obligatorio que cada homicidio de una mujer sea investigado como feminicidio.

Claudia Sheinbaum aseguró que será la primera presidenta de México con el apoyo de la ciudadanía. Anticipó que “gobernará con la obligada división entre poder político y poder económico”.

Nunca me someteré a ningún poder económico político o extranjero, siempre trabajaré por el interés supremo del pueblo de México y de la Nación”, manifestó.

La coordinadora de los Comités de Defensa de la Transformación afirmó que su gobierno garantizará las libertades de expresión, de prensa, de reunión, de movilización, y que se respetarán los derechos humanos.

Adelantó que siempre habrá buena voluntad para la coordinación con Estados Unidos. Sin embargo, exigirá también el respeto a la soberanía nacional.

Coordinación sí, subordinación no”, expresó.

En cuanto el salario mínimo, propuso negociar con el sector empresarial para que éste llegue a un equivalente de 2.5 millones canastas básicas diarias, lo que significaría un aumento de cerca del 11%.

En materia de salud visualizó trabajar para erradicar enfermedades crónico degenerativas y planteó que todos los mexicanos, desde su nacimiento, queden afiliados al servicio público de salud.

Ofreció promover la obligatoriedad de la Seguridad Social para los repartidores de aplicaciones telefónicas que son contratados en esquemas fuera de la ley.

En el rubro de seguridad expuso atender las causas de la violencia, consolidar la Guardia Nacional y su coordinación con las policías estatales. Fortalecer la inteligencia, la investigación y el trabajo conjunto para reducir la impunidad. Destacó que invitará al fiscal general de la República a que se integre a las reuniones del gabinete como hizo con la exfiscal de la Ciudad de México, Ernestina Godoy, cuando fue jefa de Gobierno.

En su discurso, que duró más de una hora, la doctora Claudia Sheinbaum recibió gritos de apoyo de “presidenta” por seguidores, simpatizantes y militantes que viajaron, principalmente, del Estado de México, Hidalgo, Guerrero, Michoacán, además de miembros del magisterio y petroleros, entre otros.

Como invitados especiales asistieron diputados que lograron sus candidaturas para reelección, hasta nuevos morenistas y aliados de la 4T, antes expriistas como Alejandro Murat, Adrián Ruvalcaba, experredistas, Víctor Hugo Lobo Román, y hasta aquellos que se dijeron independientes como Pedro Kumamoto.

Personalidades que se hicieron presentes en el inicio de campaña de Sheinbaum.
“PRESIDENTA, PRESIDENTA!”, EL NUEVO GRITO DE LA 4T
Más desbordada de obradoristas que en 2006, 2012 y 2018, en la plaza del Zócalo capitalino se estrenó ayer un inédito grito de batalla: “¡Presidenta, presidenta!”.

Es el apapacho de una multitud guinda que grita que Claudia es la mejor y que porta su nombre y la silueta de su peinado en gorras, playeras, mascadas, globos y muñecas de tela y papel maché.

Es la fiesta de las bases de la autoproclamada Cuarta Transformación que gobernadores, alcaldes, diputados y senadores han movilizado desde todos los puntos del país hasta la plaza de la Constitución, deleite para una parvada de drones que compite en captar la suma de los afluentes humanos.

La candidata presidencial llega con los aspirantes a las gubernaturas y al Congreso, a quienes en una reunión previa pidió defensa del plan C de López Obrador y trabajo de tierra para ganar la mayoría calificada. Y lo hace dejándose querer por el tumulto, deteniéndose a escuchar a quienes le hablan al oído y le piden selfies.

Mientras, Jesusa Rodríguez y Ana María Lomelí, las presentadoras, pasan revista de los acompañantes que —con excepción de Noroña- reciben poco caso: Marcelo Ebrard, Adán Augusto López, Manuel Velasco.

Vista aérea del Zócalo Capitalino.
Elena Poniatowska y Tatiana Clouthier. Pero también las nuevas adquisiciones: Pedro Kumamoto, Arturo Zaldívar, Adrián Rubalcava… Y Omar García Harfuch, Ernestina Godoy y Clara Brugada, la única en compartir el micrófono con la exjefa de Gobierno.

Es el arranque del último jalón, los 90 días de campaña de una Claudia Sheinbaum que repite por enésima vez la disyuntiva de esta contienda y en la que resbala y de inmediato corrige cuando pregunta si quieren que continúe la corrupción, pero debía decir la transformación.

Y en medio de los cien compromisos de campaña que enlistó en el mensaje de 75 minutos, para el que pidió un voto de paciencia, hubo novedades: una República sana, una República científica, una República lectora, medio millón de viviendas y un satélite de telecomunicaciones en órbita.

Apenas una respuesta de contraste para su competidora de la oposición que en el primer minuto del día puso el acento en la seguridad: “No se trata de mano dura, de guerras o de autoritarismos, sino de justicia en un sentido amplio”.

Más cercana a las mantas de los petroleros que ahí la festinaron, que de los normalistas de Ayotzinapa que colgaron su mega manta en Palacio Nacional, la candidata del segundo piso de la transformación hizo suyos los pendientes del presidente López obrador, la promesa más recompensada de la tarde con el rugido de presidenta.