VIVIR CON ESPERANZA «Despidamos 2019 y recibamos el año 2020 con gran esperanza»

Padre Jacinto Rojas Ramos.

Un año está llegado a su fin, dejando su indeleble marca en nuestras vidas. Estamos a unas horas de despedir 2019 y como haya sido vivamos agradecidos.

La Navidad se ha desenvuelto. Las luces de Navidad dentro de poco se apagarán. Notarás el árbol parado solo en la esquina, apagado y sin decoración.

Miras hacia otro lado y te das cuenta de que todavía hay confeti de la fiesta de año nuevo que cubre los rincones de tu sala de estar y las cenizas en la calle testifican que no habrá más fuegos artificiales. Todo se sentirá estéril. No más sidra de manzana espumosa. No hay más regalos de colores brillantes debajo de tu árbol. Ni siquiera hay una venta en el centro comercial para animarte. Sientes que la familiar sensación de que lo bueno pasó muy rápido.

Esta época del año puede ser difícil. Parece que toda la diversión ha pasado y no hay nada que esperar. Regresar a la misma rutina anterior, al mismo trabajo y a los mismos problemas familiares, excepto que esta vez sentirás que algunas libras adicionales se han unido a ti para tu aventura en el año nuevo. Todo esto, más un vistazo a la declaración de la tarjeta de crédito, es más que suficiente para atemorizar a cualquier persona después de las fiestas navideñas y fin de año.

Por muy tentador que sea, no dejes que el desánimo se asiente. ¡Contraataca! Comienza por recordar la diversión de las fiestas con un corazón alegre, listo para saborear los recuerdos. Haz un mosaico de las imágenes de tu cámara fotográfica y así tendrás algo para recordar.

Entonces, mira hacia adelante, inicia el año 2020. Date cuenta de que esta es una época emocionante del año, un momento para un nuevo comienzo y una segunda oportunidad. El año ante ti es puro e intacto. En este momento, no hay errores que te arrastran hacia abajo. No hay viajes de culpa. Sólo hay un glorioso, largo año por delante, un total de doce meses en los que puedes crear nuevos recuerdos.

Arrastra el lápiz en el papel. Haz una lista de las metas que te gustaría lograr este año. Da un paso más allá y establece líneas de tiempo específicas para lograr estos objetivos en lugar de sólo “dentro del año”. Te sorprenderás de cómo el simple hecho de escribir algo puede ayudar a que esto suceda.

¿Cuáles son tus sueños para este nuevo año? ¿Qué quieres lograr con tu familia? ¿Quieres irte de vacaciones en verano? ¿Quieres volver a tapizar ese sofá? ¿Aprovechar mejor el tiempo? ¿Leer un poco más? ¡Soñemos despiertos y soñemos en grande! No hay una meta demasiado inalcanzable, ninguna estrella está demasiado alta en el cielo para que la puedas tocar, porque para Dios nada es imposible.

Puede que te sientas un poco triste por guardar tus adornos navideños y dejar que la vida vuelva a ser “normal”. Pero no tiene que ser así. Mira al futuro con esperanza y pasa este tiempo preparándote para lo que Dios tiene reservado para ti y tu familia. Encuentra maneras de enfocarte en ser la mejor persona para este año nuevo y observa lo que puede suceder. Pero lo más importante es que no olvides agregar a Dios a tu lista de proyectos y sueños para el nuevo año.

¡Feliz año 2020!

rrjacinto_9@hotmail.com