¿Qué diferencia la neumonía normal de la que provoca la Covid-19?

  • neumonía causada por el virus de la Covid-19 tiene una duración más larga desde que se inician los síntomas hasta que aparece una insuficiencia respiratoria, lo que hace que el daño en el pulmón sea mayor.

Algunas personas con Covid-19 desarrollan una neumonía grave. Sin embargo, esta neumonía no parece ser como la que provocan otras bacterias o virus como el de la gripe.

Un reciente estudio publicado en la revista Nature explora las diferencias entre la neumonía causada por el virus de la Covid-19 y la neumonía típica.

¿CUÁNDO SE PRODUCE UNA NEUMONÍA?

Una neumonía es una inflamación de los pulmones debida a una infección. Se puede dar en un solo pulmón o en ambos (en este caso se conoce como pulmonía bilateral).

Cuando un patógeno entra en contacto con las células de los pulmones, nuestro sistema inmunitario se pone en alerta para luchar contra él.

Esto hace que los alveolos (unas pequeñas bolsitas que se llenan de aire cuando respiramos) se llenen de líquido o pus, limitando así la absorción de oxígeno.

Diversos patógenos pueden inducir una neumonía:

Bacterias. Las infecciones bacterianas son la causa más común de la neumonía. El Streptococcus pneumoniae es el responsable de la mayoría de neumonías bacterianas.

Hongos. La neumonía por hongos es más común en las personas con enfermedades crónicas o el sistema inmunitario debilitado.

Virus. El virus sincitial respiratorio es, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la causa más frecuente de neumonía vírica. Otros virus, como el de la gripe o el de la Covid-19, también pueden provocar una neumonía.

Los síntomas más habituales son dolor en el pecho al respirar o toser, fiebre, escalofríos, tos (generalmente con flema), dificultad para respirar, cansancio, náuseas, vómitos y diarrea.

El tratamiento es diferente en función del patógeno que haya causado la neumonía. En todos los casos, no obstante, es fundamental detectarla y tratarla a tiempo para evitar que se complique.

LA NEUMONÍA DE LA COVID-19 DURA MÁS

Todavía son muchas las dudas que rodean al virus de la Covid-19 y los esfuerzos de la comunidad científica se centran en descifrar cómo actúa en nuestro organismo para así lograr tratarlo de forma efectiva.

Científicos de la Escuela de Medicina Feinberg de la Universidad Northwestern han llevado a cabo un estudio para determinar las características particulares de la neumonía desencadenada por el virus SARS-CoV-2 (que causa la Covid-19).

Los investigadores recolectaron muestras de 88 pacientes con neumonía causada por el virus de la Covid-19 y de 211 pacientes con neumonía provocada por otros patógenos.

Observaron que, en lugar de infectar rápidamente grandes áreas del pulmón, el SARS-CoV-2 se instala en diversas zonas pequeñas del pulmón.

Luego secuestra las células inmunes de los pulmones y las usa para diseminarse por el pulmón durante un período de tiempo bastante largo, de días o incluso semanas.

A medida que la infección se mueve lentamente a través del pulmón, va dejando daño a su paso y alimenta continuamente la fiebre, la presión arterial baja y el daño en los riñones, el cerebro, el corazón y otros órganos.

“A diferencia de otros tipos de neumonía, la neumonía por SARS-CoV-2 se caracteriza por una larga duración entre el inicio de los síntomas y el desarrollo de insuficiencia respiratoria (6 a 12 días) y un curso prolongado de ventilación mecánica”, explican.

En la neumonía causada por el virus de la gripe A, por ejemplo, el intervalo entre la aparición de los síntomas de la neumonía y la insuficiencia respiratoria es de 1 a 3 días o menos.

Así, los investigadores sugieren que las complicaciones graves de la neumonía causada por la Covid-19 en comparación con otras neumonías podrían estar más relacionadas con su evolución prolongada en el tiempo que con que el hecho de que sea una enfermedad más grave.

CÓMO SE PUEDE TRATAR Y ALIVIAR

El análisis ha ayudado a identificar a dos objetivos que pueden ayudar a tratar la neumonía grave causada por la Covid-19 y reducir su daño: los macrófagos y las células T.

Los investigadores creen que los macrófagos (unas células normalmente encargadas de proteger el pulmón), pueden infectarse con el SARS-CoV-2 y contribuir a propagar la infección a través del pulmón.

La Universidad de Northwestern probará este año un fármaco experimental para silenciar la respuesta inflamatoria de estas células inmunitarias.

«Nuestro objetivo es hacer que el Covid-19 sea leve en lugar de grave, haciéndolo comparable a un fuerte resfriado», indica el Dr. Scott Budinger, uno de los autores del estudio.